Una mañana en el museo

argantonio



Aquí reina el silencio más expresivo.San Bruno vista a quien fue su maestro, el papa Urbano II, que está más pendiente de nosotros que de su alumno, cada uno está en su mundo.                                                        La virgen acoge bajo su manto a los cartujos humildes y acaricia con sus manos  la frente febril de los monjes, tostados por el sol, detrás aparece el milagro de San Hugo que quiso tentar a los cartujos llevándoles carne en la quincuagésima de Cuaresma, tuvieron una larga reflexión con Dios tan larga que duró cuarenta días, al cabo de tan largo sueño, la carne se había convertido en ceniza y desde entonces los cartujos rezan cultivando mientras cavan sus tumbas, saludando a la muerte cada mañana

  • Autor: argantonio (Offline Offline)
  • Publicado: 17 de junio de 2019 a las 06:57
  • Comentario del autor sobre el poema: Conozco varias cartujas todas son sobrias y bellas, lugares íntimos para el recogimiento y el estudio, ello explica que algunos de nuestros grandes escritores hayan sido monjes cartujos como Antonio Gala que además es poeta, os invito a leerlo. Saludos
  • Categoría: Naturaleza
  • Lecturas: 13
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Comentarios3

  • argantonio

    Al principio debe decir San Bruno visita, no vista, perdón y gracias

  • RIMUZ

    Hermosa introspección

    Gracias

  • argantonio

    RIMUZ la escena aquí descrita fue pintada por el genial pintor Zurbaran y se puede ver en el museo de bellas artes de Sevilla, tenemos mucha suerte porque este hombre eligiera esta ciudad para trabajar, la colección de su obra es incomparable, saludos



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