Llega la noche a mi cama,
no logró conciliar el sueño,
ha llegado hasta mi alcoba,
la dama que yo más quiero.
No cuento con su presencia,
no puedo sentir su cuerpo,
pero si puedo acordarme,
de algunos momentos bellos.
Tras meses sin poder verla,
una noche de pasión,
los besos y los abrazos,
entregados al amor.
Saciarme de ti quisiera,
para dejar de anhelarte,
en esas noches de insomnio,
donde no puedo olvidarte.
De aquellos momentos juntos,
siempre me llevo fragmentos,
cuando no estás a mi lado,
se transforman en lamentos.
J. Piñeiro
Comentarios4
Majestuoso poema romántico, que nos brinda calor en momentos de soledad e Insomnio. Saludos cordiales.
Gracias David, saludos desde España para ti y para Mérida.
Y navegar con la dama en unas horas de pasión perpetuas.
¡ Bellísimo !
Gracias Dolores, he marcado como favorito un poema tuyo que me encanta. Saludos desde esa tierra que ya he visitado.
Gracias Caballero, un placer compartir contigo estas letras.
Mi tierra es bella, un contraste de todo lo que tiene esta vida pero es bella.
Un abrazo.
Saciarme de ti quisiera,
para dejar de anhelarte,
en esas noches de insomnio,
donde no puedo olvidarte.
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ESTO ES MUY BELLO.
SALUDOS POETA
Un orgullo para mí tus visitas a mis poemas Alicia, un ferviente admirador desde España. Saludos
Muy bonito.
Muchas gracias.
Abrazote.
Sami.
Fiel a tu cita, que maja eres. Gracias Samanta. Saludos
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