SI YO PUDIERA...

  Nos cuenta DACIA MARAINI, una de las más destacadas literatas Italianas; LA INFANCIA ES EL ORIGEN DE UN ECO QUE SE EXTIENDE HASTA LA MUERTE, verdad de a puño, que golpea inexorablemente sobre la incredulidad que envuelve a muchos...con respecto a nuestro ser: DESDE ALLÁ LEJOS Y HACE TIEMPO.

No alcanzo a comprender a mucha gente que se pasa la vida haciendo una negación de su pasado, tal vez es una moda, hay tantas que no entiendo...quizá sea una de ellas, esto viene a cuento porque yo que para bien o para mal soy un nostálgico empedernido, noto como un rechazo de alguna gente, por desgracia...más de la cuenta.

No me considero dueño de la verdad, simplemente digo “la mía” hasta que me demuestren lo contrario, entonces me retracto...como corresponde. En este transitar cotidiano por interminables arterias, noto que me cuesta cada vez más ubicarme en un entorno tan alienante como este, solamente puedo conseguirlo gracias al vaso comunicante que tengo con mi pasado, (léase desde mi infancia hasta el presente), cualquier etapa de estas me ha dejado de todo, buenas y malas, no se en que medida unas y las otras.

 Pero lo que si tengo claro es que no podría vivir sin el pasado, ni siquiera me lo puedo imaginar.

Si uno va a negar su trayectoria tendríamos un contrasentido total, puesto que no podríamos entender como puede haber un individuo SIN HISTORIA.

Hay cosas que se aprenden de chico, no lo digo solamente yo, sino la experiencia “de los hombres sabios” que han estudiado a fondo esta materia, pero mientras ellos, los eruditos siguen hurgando en ese metier...LES VOY A TIRAR ALGUNOS EJEMPLOS.

¿Quién puede hablar de amistad, sin haber hecho “escuela” de chico?, ¿cómo se puede ser solidario y desinteresado en sus actos sin haber mamado primero, los consejos y los ejemplos de nuestra maestra de primer grado?.

¿Cómo poder deleitarse ante el libre vuelo de una mariposa, si en su infancia no se deleitó corriendo tras ellas?, ¿quién puede olvidarse el impacto emocional de un enjambre de “bichitos de luz” alumbrando nuestras fantasías infantiles? ¿Cómo se puede medir la intensidad de un gran amor, si no se estuvo enamorado de un imposible...SIENDO UN ADOLESCENTE?.

Podría seguir con ejemplos hasta el infinito, pero con estos son suficientes, por eso después de meditarlo largamente, considero que es hora de cortar las amarras que me atan a esta dársena, donde como un huevo gigante se ha ido gestando una cruel palabra: ¡GLOBALIZACIÓN!.

En nombre de ella nos han quitado SUEÑOS, IDEALES Y EXPECTATIVAS DE FUTURO, para rematarla con lo más atroz...NOS OBLIGARON A SER INDIVIDUALISTAS.

Como todavía estoy a tiempo de salvarme, no permitiré que me conviertan en un robot, por eso he tomado una drástica determinación: buscaré al niño que llevo en mi, nos tomaremos una nube color esperanza, e iremos a algún reino encantado en busca de futuro, de amor, comprensión y parámetros…para poder seguir.

Atrás quedarán:  la mediocridad, la obsecuencia, “el tanto tienes tanto vales”...y otros contaminantes más.

              DIOS QUIERA QUE ESTA ENSOÑACIÓN NO TENGA FIN...

                                                                                                           ¡QUE ASÍ SEA!.

                                            Boris Gold    (simplemente...un poeta)