De aquí a la eternidad

Carlos Hector Alvarez

"Sólo tú y yo sabemos lo que ignora la gente
al cambiar un saludo ceremonioso y frío,
porque nadie sospecha que es falso tu desvío,
ni cuánto amor esconde mi gesto indiferente.

Sólo tú y yo sabemos por qué mi boca miente,
relatando la historia de un fugaz amorío;
y tú apenas me escuchas y yo no te sonrío...
Y aún nos arde en los labios algún beso reciente.

Sólo tú y yo sabemos que existe una simiente
germinando en la sombra de este surco vacío,
porque su flor profunda no se ve, ni se siente.

Y así dos orillas tu corazón y el mío,
pues, aunque las separa la corriente de un río,
por debajo del río se unen secretamente." José A. Buesa

 

 

 

 

 

Sentado frente al teléfono

espero, la tan ansiada llamada

que me diga que vendrás,

que me quieres y sigues siendo mía.

Como aquel, no tan lejano día

en que el destino nos puso frente a frente

y comprendimos sin palabras

que seriamos el uno, para el otro.

Una feliz coincidencia

nos unió, sin dar importancia

al hecho de estar casados.

Tu marido y mi esposa no fueron obstáculos,

en la unión de nuestros corazones,

más allá, de sentirnos en pecado

El vivir con ellos fue un tiempo perdido

que la vida nos robó, desaprensiva.

Hoy lo recuperamos con nuestro amor,

aunque vivamos separados.

Nuestras almas van unidas por lazos

que nadie nunca, podrá cortar

porque lo que nosotros sentimos

no sabe de tijeras ni navajas-

Llámame amor mío, no importa la tardanza

sé que me amas y sabes que te amo

eso nos alcanza para ser felices

De aquí, a la eterna lontananza.

Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos Novedades semanales




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.