Parte.1

Vanessa Figueroa

Haz deshonrado mi nombre, queriéndote alejar de mi, pero la cuerda te esta rompiendo en pedazos.

Los cristales rotos de mi corazón no han dejado de caer en esta esquina fría que me desconoce,

mi cuerpo se siente débil, me vas matando poco a poco, hiervo en mi propia sangre al beber el veneno de tus labios.

Me quieres cerca pero cada vez me alejas más, me pides que me quede pero ya tienes otro camino que desñora tus palabras secas. 

Tu lengua está al borde de tocar el falso amor que algunos días nos hemos de entregar.

No sabes lo que quieres y me confundes, te pones en mi contra y haces que esté en contracorriente de mi pensar. 

No me trates como ese secreto que es prohibido tocar, y al qué no le debes decir nada de lo que sucede mientras tu censura la seduce.

Debo decir que te he hecho esperar pero has llegado cuando mis raíces yacían en el aire, y cuando encontraron su camino en ti fueron expulsadas,

Y ahora

No puedo mantener la mirada, que en tus ojos florece la luz de mi llanto, no soporto tenerte cerca y eres un ser que desconozco. 

Si yo te odiara, mi odio te daría 

en las palabras, rotundo y seguro,

pero te quiero y mi amor no se confía a este hablar de los hombres.

El cielo perdura en perder el sentido de mi sentir, me descontrolas.

Todo por mi callar atribulado 

que es más atroz que el entrar en la muerte.

Pero debo de aceptar que si decides dejarme a la orilla del corazón, guárdame ahí y no me toques que ya te habré olvidado.

Y al no dejarme ahí le he fallado a mi honor.

Fue robado mi ser abstracto arrastrado por la tierra, mientras conducían mi alma hacía lo desconocido, y en el abismo la desecharon. 

Te extraño pero no te quiero más.

 

                                                    

Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.