16 Monedas

Es de suponer que con 16 monedas no pagan bien en el amor,

Que una rocola no tiene tu canción.

Dime algo, ¿acaso tu guitarra aún sigue tan afinada?

Otro tiempo para complacer,

una melodía única en el cuarto de una sola vela.

Creo que estoy muriendo cada vez más, toda una doble moral.

Escapando en medio de aquel bar,

entre la pared y la botella, entre el cenicero y una bandera.

Me ahogo solo por respirar,

me hundo entre la amistad y

un viaje de vuelta a una olvidada ciudad.

Me cuido de estar en esa ventana,

mirando como me abraza la madrugada.

Me termino un trago y un cigarro,

es tan sencillo odiarte mientras te miro

del otro lado de esa maldita pared.

Dime si aun escondes todo lo que eres en tu pecho

todo por un despecho.

Que he hecho para tanto rechazo,

puedo ver hacia atrás, puedo fumar sin pensar.

Puedo escuchar en la profundidad como cierras la puerta,

como odias la espera, como es posible que no pueda ya ni pensar

cuando fue la última vez que te logré abrazar.

Tu cabello corto, negro, oscuro, lacio, rojo, café, largo, colochos,

ya ni sé, tu piel canela, blanca, oscura, tierna y suave, tus pechos grandes y pequeños.

La verdad es que tanto grito no me deja pensar e imaginar.

 

¿Dime algo, esos paseos por las líneas del tren nos llevan hacia algún lugar?

Puede que logre encontrarnos en la esquina de tu cuidad,

Aunque evito pasar por cualquier lugar donde siquiera te pueda encontrar.

 

En la oscuridad te puedo mirar, me siento atado sin poderte abrazar.

Esos bailes apasionados por los que por nada brindábamos,

esas tardes de viejas melodías.

 

Dime algo… se que estas ahí, mi pequeño recuerdo.

Aléjate de mí pues te odio, te amo, me embriago y me desvanezco en el ocaso.