El drama de los caminantes

Uno a uno fueron llegando 

Desde distintos puntos.

Se fueron agrupando

Y empezaron a caminar juntos.

Formando inmensas caravanas 

Multitudes de sombras descuartizadas

Que aumentaban como enjambre de abejas

Cuando son alborotadas.

Por las almas intrusas.

Como una gran marejada

Cuando las olas se alcanzan

Unas tras otras

 Y el mar se descontrola.

Como un simple rumor

Que va en aumento

Y se trastoca en un alboroto.

Que se alza contra el dolor

Que provoca el atropello

A sus fundamentales derechos. 

 

Como el polvo del camino

Que arrastra el viento

Hasta convertirse en un ciclón 

Llevándose todos los recuerdos.

 

Arrancaron a pedazos sus almas castizas

Dejaron su barrio, sus amigos, sus casas.

Buscando una claridad 

En medio de la oscuridad.

 

Al frente llevan la esperanza

Y atrás va la desesperanza

Y el recuerdo de los besos y abrazos

Que se quedaron postreros.

 

Un salvavidas.

Una fogata en la noche.

Una estrella que los guíe.

Un camino con las miradas fijas.

 Buscarán en el intento

 Los años que les han quitado.

El derecho a la vida que les han hurtado

Y los sueños que les han negado.

 

Sus esperanzas de supervivencia la llevan cargando.

De la crueldad y de la pobreza van huyendo.

Impuesto por el mal gobierno

Del que se cree dueño de sus destinos.

 

Quieren migrar para buscar ayuda 

Para la familia que se queda atrás.

Quieren escapar de la condena

A morir de hambre sin tener culpa.

 

Se van escapando del hambre y de las balas

Del líder de las manos ensangrentadas.

Mejor se van para conservar la vida

Solo pedimos fuerza para seguir y para llegar.

 

Van como zombies queriendo

 Salvar la vida

Tratando de cruzar el Mar Muerto

Y revivir a la vida nueva.

Autor: Antonio Encinas Carranza

De: Lima, Perú

D.R.