Pobre chica.

Pobre chica que llora sola,
con la compañía de ventanas,
derramando dulces lágrimas
sin pensar nada, mirando la luna.

Un pijama suave que le tapa,
maquillaje rodando en su cara.
del silencio dejada callada,
susurros y gritos en su alma.

El mundo es tan inmenso,
y solo llora por su pequeño hueco.
Tienes las llaves de mi burbuja,
donde mi compañía en forma de silencio,
mis letras por todo tu cuerpo,
te abrazan como pequeño a su mamá.

De sus ojos brotan finas rosas,
su luz interior las riega de magia,
el mundo es tuyo con tu melancolía,
la magia la tienes tú en tu alma.

Gran cuerpo redondo que gira y daña,
con cada ola de sus movimientos
arrastran tristes brisas de invierno.
No te equivoques, la nieve tiene su belleza,
pálida y fría, como tu piel, única belleza.

El camino tiene demasiadas piedras,
donde las buenas hierbas ya no arropan,
no te preocupes, tienes puentes hacia la paz,
te los entrego a cambio de tu alegría,
esa que al despertar da sentido al día.

Así que, no estás sola esta noche apagada,
te observo desde el cielo, desde las estrellas,
te lanzo besos a modo de gotas de lluvia,
donde poder camuflar tus lágrimas.