Volver a la Iglesia si la hemos dejado a un lado nos conectará con hermanos en situaciones similares, que quizás necesiten una palabra de aliento o un plato de comida caliente sobre su mesa. Disponernos a ayudar, a sanar entre todos, nos quitará el peso de creer que estamos solos para enfrentar una realidad que puede ser dura. Confiar en que todo será mejor y en que podemos salir juntos nos dará fuerzas para continuar. Aquellos que se queden en soledad, observando sólo sus penas y necesidades posiblemente no logren salir del desasosiego. Nuestro Padre nos acompañará y nos brindará paz cuando estemos nerviosos y atormentados.
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Autor:
Eliamara Martinez (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 21 de febrero de 2019 a las 03:53
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 27
- Usuario favorito de este poema: Lualpri.
Offline)
Comentarios2
Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen,
y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.
Buena disertación.
Saludos
Amén gracias 🙏 comentar
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