¿Quién eres tú?

En ocasiones mi existencia me exige una respuesta, es difícil de contestar pues no es que no lo haya pensado, no logro encontrar la satisfactoria respuesta que tiene que recaer en esta contestación.

¿Quién soy yo?

¿Seré un soñador nunca soñado, aquel que quiere encajar, pero no es más que la pieza sobrante en un extenso mundo actual?

¿Seré un fugitivo de mis propios sueños, tal vez un cazador de mis mejores momentos y un elevador para mis peores fracasos?

¿Seré un joven que inicia en la poesía, cuyos versos se dedican a la mujer, que siempre es el emblema de su frío amanecer?

O probablemente ¿Seré una lista interminable de momentos tristes rodeados de melancolía, satisfacción para mis mejores defectos?

¿Seré el que pudo cambiar el rumbo de vidas con tan solo decir hola y saber escuchar?

O ¿El que intenta no llorar por la vida, y si llorar por la muerte?

¿Seré aquel romántico?, ¿Aquel enamorado?

O ¿Seré aquel fracasado por no intentarlo y aquel exitoso por acertarlo?

¿Seré la vida no vivida?, ¿Aquel que escribe cuentos para no vivirlos?, ¿Aquel que escribe poemas para no dedicarlos?

O ¿Seré el capitán de mi propio destino, aquel que navega sin rumbo por este mar de pasiones, ahogando su velero, con sus propias inseguridades?

¿Seré el arte no pintada y la canción no cantada?,¿Aquel que llora por no entender nada?, ¿Aquel que sonríe por la vida no deseada?

¿Seré la persona más vacía, sin versos ni poesías?

O ¿Seré tristezas y alegrías?

Un sin fin de respuestas me vienen a la mente, pero no entienden que no son suficientes.

Un sin fin de ideas recaen sobre mi cabeza, pero son siempre de poca naturaleza.

Llega de nuevo la tarde y me pregunto

¿Qué escribir?,¿No tengo la respuesta?

¿Amigos y familia se verán involucrados?

¿Acaso las victorias y derrotas serán al menos un renglón de mis imaginados versos?

Y es que todos los minutos, horas, de mi extraña vida se resumen a esta simple pregunta, pues a pesar de no conocer la repuesta, parece ser que no importa, pues sigo viviendo, sigo el cauce natural de la vida, pero sé, lo siento en todo momento, viajo sin dirección, sin un lugar hacia dónde dirigirme y todo se remonta a esa pregunta, ya que ¿Qué sería un barco sin un lugar de destino?

Al menos eso es lo que hasta ahora comprendo, una pregunta que puede llevarme toda mi vida contestar.

¿Quiero ser el hombre más rico del mundo?

¿Quiero ser el mejor esposo y padre de la historia?

¿Quiero ser la persona más feliz de todo el mundo?

Todo el día he tratado de acabar con esto que escribo, pues me hace pensar más de lo usual y eso me asusta.

Ahora que he escrito todo, pero a la vez nada, te pregunto:

¿Acaso no eres el que tiene una relación y se dice ser el Ser más afortunado del mundo?

¿Acaso no eres el que presume de sus logros con las demás con el fin de ser reconocido?

¿Acaso no eres el que se siente vacío todo el tiempo, pero lo niegas llenando eso con juegos, amistades o hobbies?

¿Acaso no eres el que piensa que con alcanzar sus metas llenarás eso que sabes que está vacío, pero no sabes qué es?

Para mí, pensar que eso es lo que soy no es suficiente.

¡Vaya! que lo puedes entender tú mismo.

Esta tarde he decidido detenerme por un momento, he decidido soportar un poco más la duda.

Cierro la mente, la pequeña parte de ella que me obliga a pensar en esto, pero antes de encerrarla por completo, antes de dejarla a un lado, cierro los ojos y me vuelvo a preguntar

¿Quién soy yo?

No consigo la respuesta, pero ¡vaya! que esto no ha acabado.

!¿Estás listo para intentarlo?¡

¿Quién eres tú?