Una vieja ruina sin flores. Una ribera sin un sauce. Una mujer sin mil amores. Un agua perdida sin cauce. .. Soy un eremita sin desierto. Perdido en la multitud . Soy como un libro abierto . Del pecado y la virtud . Viví en una ciudad extraña. Que se miraba en el río . Que era su mejor espejo. Donde la mujer es grácil caña . Que resiste al calor y al frío. Y es eternamente joven lo viejo
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Autor:
argantonio (
Offline) - Publicado: 30 de diciembre de 2018 a las 15:35
- Comentario del autor sobre el poema: Desde que era pequeño aprendí a soñar junto al río. Y espero que el sueño no se convierta en pesadilla. Saludos a los Amigos del Alma
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 12
- Usuario favorito de este poema: Lualpri.
Offline)
Comentarios2
El río que nos acompaña hasta el final del viaje
El río que nos recuerda de donde venimos y adonde debemos volver. Saludos
Muy interesante.....
Saludos..
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