Conforme arrecia impetuoso el frío
sobre los tejados de las casas
más se enervan, languidecientes,
los luceros esculpidos allí donde
solo mi fe, crédula e insistente, asoma.
Quisiera preguntarte lo que en otras ocasiones
y mirar cómo crece el rubor en los jardines
o escuchar la nieve tropezando lentamente
en cada piedra que, gimiendo, no llora.
El reflejo de mi voz sobre la espada
escribe heridas que recitan versos rotos
erguidos firmemente en el alma.
Y por las calles solo hay muerte, muerte
y una reyerta que no me arranca el amor
ni la memoria.
Contemplo la figura que sostengo
acunada en el deseo y la amargura.
Arrecian como arrecia el frío
mientras recuerdo el cristal tan tenue
de tus ojos humedecidos por la luna.
© Derechos reservados.
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Autor:
Lucia Rodriguez Lopez (
Offline) - Publicado: 21 de noviembre de 2018 a las 11:34
- Categoría: Amor
- Lecturas: 59
- Usuario favorito de este poema: El Hombre de la Rosa.
Offline)
Comentarios2
Siempre queda el recuerdo por más frágil que sea. Pero siempre hay un mañana con una nueva mirada por descubrir.
Me gustó leerte estimada amiga Lucía. Que te sea un lindo día.
Saludos cordiales a la distancia.
Muchas gracias. Igualmente te deseo un buen día.
Saludos.
La belleza y la hermosura de las palabras alumbran tu poema de amor estimada Lucia
Un placer haber leído tu poesía.
Saludos de amistad
El Hombre de la Rosa
Muchas gracias. Me agradan mucho tus palabras. Me alegro de que te guste.
Un saludo.
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