Desahogando la ansiedad

Soy dueño de algo que no tengo
de una soledad náufraga
de ansiedades rendidas
vidente de fantasmas,
¿Qué clase de destino es este?
¿Qué manos apretan mi alma?
¿Qué épocas se irá saltando mi vida sin avisar?
¿Qué tinte hará menos nostálgico los recuerdos?
Cuanto peso carga el corazón a veces,
cual transfigurados azules
tiende el agua en las noches,
noches sin olvido...
Y pasa el tiempo entre grietas
dejando quizá algo en alguna
memoria poética.
Se termina la tinta,
se termina aquel fragmento que amamos tanto aunque haya sido con el mayor de los amores,
Y todo ha de terminarse,
hasta el anhelo que hoy tengo,
tal es la vida, que no se recuerda
lo que permitió vivirnos.