Soy la que querés

Florencia Abril Olivera

Soy lo que querés que sea me querés a la izquierda un poco más a la derecha enderezada no, pero no tanto ahí, ahí Sí, te gusta Soy la de los aritos de perlas la falda recatada la sonrisa medida las manos delicadas la que cocina con receta de hace setenta años y ¿cómo se limpia esa mancha? La que tiene todo en su lugar Péiname, maquíllame, mostrame cómo debo ser. ¿Quién sos vos? Años AÑOS creí que eso debí ser. ¿Quién sos? No, pará. Déjame terminar No, escúchame No, así no Pará, escúchame ¡Escúchame! ¡Escúchame! ¡Escúchame! ¡NO! Déjame de peinar, no me gusta, nunca me gustó. Así sí, ¿y qué? No, escúchame ahora vos a mí. Años. Años. Ahora vos me vas a escuchar. Y te lo voy a gritar. Porque me duele la garganta de tanto quedarme callada. Y me vas a ver. Por supuesto que me vas a ver. Soy ellas. Me parezco a ellas. Y a la vez no. Así, me paro acá. Así, me lo cortó así. Llévate el labial, quiero el rímel, no, nada de colorete. Me invento la receta, sí, me invento la receta. Y a veces sale comestible y a veces no. Tengo algo que confesarte. Escúchame bien, porque no lo voy a repetir. Me gustan... ¿me escuchas? Me gustan las máquinas de tiempo. Sí, las máquinas de tiempo. De color azul preferentemente. Y que sean más grande por dentro. Yo soy más grande por dentro. Uso aritos, uno diferente de cada lado. El de mariposas acá y el de la guitarra del otro lado. Mírame las manos, sí estas, las tan delicaditas. ¿No las ves? Las escondí muy bien, yo siempre las veo. Mis manos están llenas de cicatrices. Quiero libros, muchos libros. Poetas de antes, de ahora; novelas new adult, young adult, drama, románticos, filósofos, ciencia ficción; aguante Mario Benedetti y Jennifer Armentrout. Oliverio Girondo y Penny Reid. Pizarnik y Rothfuss. Aguante la treceava doctora. No, no quiero, déjame, no quiero. ¿Quién sos? ¿Quién sos? Me chupa un ovario. No me toques, no quiero eso. No insistas. Acá estoy. Esto soy. No tengo nada en su lugar, pero sé dónde está lo que necesito. No, no dependo de eso. Dependo de mí, pero lo quiero. Lo quiero a mi lado. Lo elijo. Lo deseo. Eso es amor. Qué viva... ¡qué viva...! Acércame tu oído, a ver si así lo entendés. ¡Qué viva la revolución!  

 

  • Autor: Florencia Abril Olivera (Offline Offline)
  • Publicado: 13 de agosto de 2018 a las 20:59
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 19
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Comentarios1

  • Galrock

    Que loca linda! 🙂



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