No sé si creer tus lágrimas o tus palabras,
tus ojos o tu sonrisa.
Dime lo que quieras, no te creo.
Solo me basta lo que me haces sentir.
Tu corriente me arrastra hasta el fondo
de un precipicio sin río.
Dime lo que quieras, solo me importa
el vértigo que me haces correr en el descenso
a tus infiernos.
Tus palabras son hojas secas que el viento
deja olvidadas en el arcén de la indiferencia.
No me hables, mìrame, sonríeme, ponme
esa cara de niña mala que tanto me hace
gozar, y soñar.
Solo quiero de ti todo lo que no puedes
contarme con palabras.
Ven aquí, siéntate y no hables durante el
resto de tu vida.
Lléname de ti sin pasarme la factura.
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Autor:
Albertín (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 30 de julio de 2018 a las 15:43
- Comentario del autor sobre el poema: Solo pido a la verdad que me ilumine, que me dé razones para vivir, no le pido que me hable de ella.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 34
- Usuario favorito de este poema: migreriana.
Offline)
Comentarios2
Una apoteósica muñeca mi amigo.
Un afectuoso saludo poeta
Me alegra verte por aquí de nuevo.
Un abrazo Tokki.
Bello poema, que da gusto leer.... Estimado poeta. Cariños C
Me alegra que te pases por mi cuchitril.
Un abrazo Cari.
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