Un cuento de amor

Esteban Mario Couceyro



ENCUENTRO
Él- ¿A qué piso va?.
Ella- Al último.
Él- Coincidimos, yo también voy al último.
…...............................................................
EN EL ASCENSOR
Ella-¿A que oficina va?.
Él- No, a ninguna, busco la terraza.
…...............................................................
EL ÚLTIMO PISO
Ella-( No creo que vaya a la terraza, por servicio del ascensor con saco y corbata). Que tenga usted, un buen día.
Él- Gracias.
…..............................................................
LA TERRAZA
Él- (Aferrado a la baranda, el viento volando sus cabellos, mientras aspira con ruidosa profundidad)
Ella- (Curiosa, asomada a la puerta, que se bate con estrépito por la ráfaga de viento).
Él – (Gira por el ruido).
Ella-¿Qué quiere hacer?
Él- (Turbado)- Nada, solo veía.
Ella- (Nerviosa, sin acercarse)- ¿Por qué morir, en un día tan hermoso?
Él- Yo no tengo la respuesta y me lo pregunto desde el amanecer.
Ella- La vida es rara, sin más, esta mañana quise tirarme en este mismo lugar.
Él- ¿No pudiste?
Ella- No, me dí cuenta que abandonaba algo, que me faltaba una parte de la vida y no podía morir incompleta.
Él- En cambio yo, estoy profundamente enamorado de la vida y no puedo mas que abandonarla.
Ella- (acercándose a sentarse junto a él) No debes consumar esto, hay mucho por qué vivir.
Él- Yo he muerto este amanecer y no queriendo hacerlo, deseo permanecer vivo.
Ella- ¿Por eso querías tirarte?, no entiendo.
Él-Quise probar, si estaba muerto...
Ella- No, no lo estás, me ves y yo te veo, no estás muerto, (comenzando a llorar).
Él- (con la voz quebrada) Vengo a buscarte, sos mi primer trabajo y no me dieron muchas explicaciones.
Ella- No entiendo.
Él- ¡Qué se yo!..., esta mañana morí y me dijeron que sería algo así como un ángel dedicado a buscar quienes intentan suicidarse, que debía ayudarlos..., me dijeron un montón de cosas más, pero no entendí nada, estaba mal..., solo recuerdo que debo ayudarte.
Ella- Pero ahora estoy bien, no quiero morir, tu ayuda no me es necesaria, (se levanta queriendo alejarse)
Él- (le toma la mano incorporándose), he venido a buscarte y no se como hacerlo...

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EN LA CALLE
En la calle, el tránsito circula ajeno, mientras las primeras penumbras ganan poco a poco al día que se va.
 

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Comentarios5

  • claudia07

    ufff excelente

    • Esteban Mario Couceyro

      Gracias Claudia, el valor de la obra, reside en tu interpretación.
      Un abrazo.
      Esteban

    • Maria Isabel Velasquez

      Bonito cuento, nunca se sabe donde se encuentra el amor.
      Hermosa melodía
      DTB SIEMPRE

      • Esteban Mario Couceyro

        Gracias María, la vida tiene sorpresas.
        Un abrazo.
        Esteban

      • Al4T

        Muy buena obra, maravillosa!!!
        cariñoso abrazo
        Alexa

        • Esteban Mario Couceyro

          Gracias por las palabras, para un amor en distintas instancias, entre la vida y la muerte.
          Un abrazo.
          Esteban

        • anbel

          A veces no vale de nada luchar contra el destino.
          Como siempre... Precioso. Un besiño.

          • Esteban Mario Couceyro

            Este es un extraño destino, donde juega la muerte, junto al amor.
            Un abrazo.
            Esteban

            • anbel

              Si, lo sé.

            • estefania22

              Era un hombre caminando bajo la lluvia llendo hacia una habitación con una vela encendida y una pistola esperando en el cajon (y la memoria en este momento no me ayuda..no recuerdo las líneas de la obra solo la impresión de estar ahí mismo o ser yo q genial el escritor) el tipo iba a matarse creyendo conocer perfectamente ya la vida y creyendo q el no era capaz de sentir ya más algo por alguien o algo por el...de pronto en medio de la lluvia una niña toda desabrigada y desaliñada se acerca corriendo hacia el el sujetandole del saco le suplica ayuda por su madre que está muy enferma y muriendo; y el se enoja ya no se si con la niña con la vida o con el..creo q con todo porque descubre q el mundo como pensaba..la vida no le es indiferente, porque incluso para molestarle algo debe tener alguna importancia.
              Bueno no podemos conocer el panorama entero de la vida..el porvenir solo podemos dar cuenta de lo vivido y eso q las cosas nunca están fijas, continúan cambiando ante nuestra percepcion cuando reflexionamos nos damos cuenta de este movimiento interno.. nuestra percepción es oscilante pero el amor y el odio parecen lo único fijo son sentimientos que atan.

              Tuve la misma sensación al leerte muy buen relato!
              Lo sentí así mira..
              La chica era la vida que le hablaba al oido, había ido a buscarla frente a la muerte a donde solo podía hacerse visible y su trabajo era aprender a vivir aunque ella no tenga idea de como es q alguien así le pueda enseñar...pero si puede porque la rescato se salvó..pienso que una y otra vez nos salvamos, elegir vivir porque alguien te recuerda que la vida es buena..toda completa..o elegir vivir porque pensemos que nos falta algo que aún no descubrimos.

              Me encantó!

              • Esteban Mario Couceyro

                Gracias Estefanía, tus palabras son generosas con mi obra, pero puedo asegurarte, que el mérito, si lo hay, es tuyo al interpretar la situación descripta.
                El relato, puede tener distintas interpretaciones, siempre vale la del lector impresionado, por la trama, que se refleja en si mismo.
                Un abrazo agradecido.
                Esteban



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