ÉXODO DE VERSOS
Escucho mis latidos
pugnando por decir lo que se callan,
ráfagas de palabras me ametrallan.
Dolor de mi alma rota
emana a borbotones por la herida,
que desde tu partida
noche a noche silente me derrota.
Deshecha gota a gota,
mis labios adheridos
gritan en su silencio, sinsentidos.
¡Este maldito orgullo!
Se cuela por las grietas de mi entraña,
dice que no te quiero, mas me engaña.
¿¡Cómo no he de quererte!?
Siendo tu amor, la tinta de la historia
que guardo en mi memoria...
¡Estoy muriendo amor, por no tenerte!
Quiero cambiar mi suerte.
Mis versos en murmullo,
acunan un te quiero en dulce arrullo.
El alba anuncia el día,
en éxodo feliz vuelan mis versos
buscando en tus miradas universos
que me hablen de palabra...
Esa que tanto enferma o tanto cura;
palabra de ternura...
Esa que nos modela, que nos labra
y espero que me abra
senderos de ilusión y de alegría,
¡fundida con tu ser, bella poesía!
Jarablanca
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Autor:
Nos une la Palabra (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 25 de junio de 2018 a las 02:59
- Comentario del autor sobre el poema: Gracias por vuestra lectura. Feliz semana. Abrazos.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 35
- Usuarios favoritos de este poema: Jareth Cruz, gonzaleja.
Offline)
Comentarios1
Amiga mía, quién no ha sentido esa ausencia de palabras, para traducirlas en verso alguna vez, pero después de repente vuelven en tropel y se liberan para entregarse al aire y llevarlas de boca en boca, de oído en oído a los corazones que las quieran acoger. Todos hemos sentido a veces esa angustia.
Entraña, como parte consustancial e íntima de la persona, para mí es plenamente diferenciada de entrañas, y creo por tanto que es válida en el contexto donde tú la usas. Un abrazo amiga contra el malajerismo
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