Cuando todavía no existías en carne y hueso
te hacía tan mía que te sentía en mis sueños;
vaya paradoja de los sentidos al sentir esto
debiendo inferir eres tan bella como el cielo.
Por un momento, dude que ello fuera cierto
pues nunca lo había sentido real este cuerpo;
a medida que iba viajando tu geografía entero
mis dudas eran barcos anclando en tu puerto.
La primer palabra de mi boca fue un te quiero,
la 2da fue te amo, carne de mi carne, sediento;
cuando acercaba hacia sus labios sentía fuego:
seguro era el poder de su luz que lleva dentro.
La abracé mis brazos como columnas de deseo,
la bese firme donde solo pueden llegar los besos,
fuimos dos almas en los campos fértil del anhelo
pero un sola bañada por la esencia de lo eterno.
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Autor:
Vito_Angeli (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 11 de junio de 2018 a las 17:51
- Comentario del autor sobre el poema: Aquí les dejo, nuevamente, otra republicación de uno de tantos poemas que me hacen vibrar con el corazón entero. Un abrazo
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 59
- Usuarios favoritos de este poema: Ma. Gloria Carreón Zapata., Sophia Sea, María C., Ofelio.
Offline)
Comentarios3
Bella y romántica obra poética nos comparte estimado autor, ¡mis felicitaciones! Un cordial saludo desde México.
Muchas gracias Ma. Gloria por pasarte y dejar tu impresión sobre el poema. Un abrazo para ti.
Románticamente hermoso!!
Saludos.
Gracias Isiszkt por tu aprecio a lo hecho. Un abrazo para ti.
Otro va para allá.
Me encantó tu romántico poema.
Un abrazo
Maestro, que lindo es tenerlo siempre conmigo. Me alegra el momento en que compartimos letras juntos. Un abrazo fortísimo para ud.
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