aqui estoy, es un mar de agua, se escucha un sonido retumbando.
La vida. Mi vida, mi vida atada aquí, atada a tu útero, atada a un cordón que nos une, atada a ti, por siempre, para siempre.
Te quiero, sin conocernos, sin saber si me quieres o si me esperas, sin saber si ya notas mi existencia. Aquí estoy mamá. Mamá biológica.
Solo puedo pedirte algo: déjame vivir, déjame ser un hijo para alguien más, déjame que alguien más encuentre en mi eso que le falta. Familia, siempre voy a ser tu familia. En algún lado de tu corazón voy a estar, tal vez en el lado más oscuro, en un rincón chiquito, muy chiquito, casi diminuto. Ahí, ahí estoy. Y vos, y vos estás en todos lados, en mi sangre, en mi corazón, en mi hígado, pulmones, riñones y también en mi útero. Ahí, donde también están tus nietxs.
Gracias mamá. Simplemente eso.
A vos te duele y yo te doy las gracias.
A vos te marca socialmente y yo te doy las gracias.
A vos que dejaste el alcohol y el cigarrillo aunque te encanta y yo te doy las gracias.
A vos te debo la vida y yo te doy las gracias.
Gracias mamá. Eterna.
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Autor:
La flaca. (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 9 de marzo de 2018 a las 14:06
- Categoría: Amor
- Lecturas: 60
- Usuarios favoritos de este poema: Ӈιρριε Ʋყє ☮, Vogelfrei, Carlos Armijo Rosas...✒️
Comentarios2
Unida a ti para siempre.
Que gran verdad.
Hermoso relato.
Saludos
Linda y verdadera carta
Saludos
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