Tú eres la noche

Se posó una noche obscura,

No había nada de luz en ella,

Pero me iluminó tu hermosura,

Resplandecía en medio del cielo como estrella,

La miré detenidamente, con ternura,

Y no cabe duda que eres así de bella,

Y siempre brillas con esa finura.

 

Aunque no era usual,

Ver esa noche así, parecía una fantasía,

Pero las curvas del cielo, me hicieron recordar tu figura sensual,

Fue una gran emoción la que sentía.

 

Qué bella era esa luna,

Reluciente en medio del paisaje,

Me hizo recordarte de una,

Porque tú eres mi mejor embalaje.

 

Tú eres magia de la noche,

Esencia de las estrellas,

De tu dulzura no tengo reproche,

Mucho menos de tu cara tan bella.

 

Tú eres la noche; fría o caliente,

Te siento en las nubes y en la brisa,

Porque tu recuerdo en mí está presente,

Y se mantiene en mí sin prisa.

 

Oh mujer tan maravillosa,

Dueña de mis sueños,

Reina hermosa,

Gracias por dejarme ser tu dueño.

 

Amor mío, y debes saber,

Que hoy en la noche me he inspirado,

Tomando todo lo que se cruza en mi parecer,

Y creando un poema encantado,

Un poema para ti, la reina de mi ser,

Quien cambió mi mundo con sólo estar a mi lado.

 

Y bajo la noche, las rosas,

También reluce su cadencia,

Así lucen como tú hermosa,

Inundando mi ser de mucha efervescencia.

 

Esos ojos que me envuelven, llenos de pasión,

Me iluminan como las estrellas,

Me aceleran el corazón,

Con cada una de tus miradas bellas.

 

Y no cabe duda mi amor, que quiero abrazarte,

Hoy esta noche y todos los días,

Para tenerte cerca y besarte,

Volver mi vida, una historia de fantasías.

 

 

Tú eres la noche, que nace en el cielo,

Eres esa luz que brilla de la luna,

Eres la estrella que más brilla,

Eres mágica como ninguna.