Impávida sostienes la balanza
mítica figura en la refriega
a veces das destellos de esperanza
pero fallas al final porque eres ciega.
Perdona si a tus plantas yo reniego
y te ofendo a rabiar con mis agravios
pero entiende que mis fuerzas no repliego
y no tengo la cultura de los sabios.
Mis ardientes súplicas renuevo
postrándome de pie ante tu imagen
y siendo pecador aún me atrevo
a pedir que tus ojos se destapen.
Entonces en tu regio pedestal
en la página dorada de la historia
con tu puño pondrás punto final
y un designio divino de victoria.
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Autor:
Paolo (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 26 de mayo de 2010 a las 15:56
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 58
- Usuario favorito de este poema: ivan semilla.
Offline)
Comentarios1
EXTRAORDINARIO POEMA
UN POCO DE JUSTICIA Y NADA MAS!
TE FELICITO
ES DE MIS FAVORITOS DE HOY
ABRAZO GRANDE
Gracias Iván por tu comentario, suena utópico por el momento, pero la sabiduría universal va a prevalecer.
Saludos
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