Los humorosos no ríen
Cantan…
Con una destemplada
Voz histérica, que sacan
De donde no hay nada
Y siempre buscan
La nota triste
La tragedia ensimismada.
Porque los humorosos
No tienen nada.
Y hasta el regocijo
Que alguna vez decantan
Cuando suben los besos
Desde el tobillo a la espalda,
No son más que urgentes ganas
De volver a la paz santa
Que sólo da el sueño
O los ojos cerrados les demandan
No, los humorosos son tristes
Desde el pie hasta el alma
Pero andan por ahí
Entre chiste y gracejada
Aunque saben bien
Que alguna vez no aguantan
Y se compran una risa eterna
Cuando cercenan su garganta
No, los humorosos no son niños…
Son viejos perennes
Porque fueron concebidos
En una triste mascarada…
Y así andan por la vida,
Siempre tienen un chiste
que les salve la jornada
y por las noches se duermen...
Sin risas… sin nada.
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Autor:
Catelgood (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 7 de septiembre de 2017 a las 14:53
- Comentario del autor sobre el poema: Leer sus poesías, estimula, emulsiona... y a veces, genera respuestas... Para "Como NIños..." De Diáfana... No es contestación, es lo que sale del alma, luego de tanta buena palabra.
- Categoría: Triste
- Lecturas: 59
Offline)
Comentarios3
Muy bueno .
Gracias Natalia, por su visita y su comentario. Un abrazo grande
Muy bueno encierra verdad, triste verdad. Gusto leerte , saludos
Fabio muchas gracias por su comentario y su visita. Es un honor su presencia. Un abrazo
Ufah!... No sé si sentir orgullo o sentir miedo Catelgood... mirá que te lo digo en mexicano... El mexicano la muerte le pela los dientes... Muy lindo hasta que hablás de cecenar gargantas... ahí si que me da miedo. No estarás depre , no?... Gracias por el comentario. Arriba ese ánimo!
Hola Diáfana. De los riesgos de desnudar el alma, es que alguien con tanta perspicacia como usted adivine por ahí algún sentimiento del día. Sin embargo sobrepaso las pequeñas angustias del día con donaire... (risas)... Adjudique la torpeza que me caracteriza y la ausencia de recursos para esa rima y nada más... Le agradezco su comentario y más el que su poema original haya dado pie al aporte pequeño y propio. Un abrazo.
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