¿Por qué?

Kevin Raphael

Por qué quieres negar que todavía mi amas,
Si los ojos no mienten y lo noto en tu mirada.


Por qué apartarnos uno del otro sin sentido y sin razón,
Si nuestras almas estan unidas por este inmenso amor.

Por qué quieres que en mi vida tome otros caminos,
Si me ha gustado recorrer el tuyo a pesar de los tropiezos.

Por qué jugarle una trampa al corazón enamorado
Y hacerlo sufrir por cosas sin sentido y sin razón.

Por qué negarte a mis caricias,
Si cada vez que te toco te erizas y se acelera tu respiración.

Por qué marchitar este fruto que con tanto empeño
He querido con amor cultivar en tu corazón.

Por qué negarte a mis besos,
Si con tan solo rozar tus labios el desenfreno de adueña de ti.

Por qué mentirle a tu piel si sabes que esta hambrienta
Del placentero contacto de sentir cerca la mía.

Por qué reprimirte el deseo de amarnos sin control,
Cuerpo a cuerpo quemando el deseo en un colchón.

Por qué no dejar fluir ese río de pasión que llevas dentro de ti.
Por qué no dejas que apague mi sed de poseerte hasta el amanecer.

Por qué no vuelves y entras en mi manantial
Para que apagues tu deseo de amar.

Por qué no olvidas tu orgullo y tu terquedad
Y te haces más simple y más fácil de amar.


Por qué dejarnos la duda de volverlo a intentar
Y que nos demos cuenta que otra vez se puede amar.

Por qué dejarme sufrir y aunque lo niegues me amas,
Ponle a este juego su fin o saldrás perjudicada.

Ver métrica de este poema
  • Autor: Dom Kasanova (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 29 de abril de 2009 a las 16:17
  • Categoría: Erótico
  • Lecturas: 162
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios +

Comentarios1

  • PETER

    vaya reflejas mucho mi amigo. esta frase "Cuerpo a cuerpo quemando el deseo en un colchón" me parece muy autentica.
    muchas veces es preferible dejar el curso natural



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.