Historia: Amor Celestial, Segunda Parte (SVP)

neosan


AVISO DE AUSENCIA DE neosan
--Indeterminado.--


Segunda Parte: La Historia De La Pluma

 

Al llegar a la tierra de su madre, Lorien isil, Horseth se adentra en el castillo sin demora, pues el tiempo se agotaba,

Madre he vuelto, traigo conmigo las aguas de yggdrasil

Que alegría hijo mío, vamos a prepararla deprisa, -se alejan de inmediato a la alcoba donde se encontraba Elizabeth cautiva en el sueño etéreo, a un paso de la muerte,

Mirana le da de beber las aguas de yggdrasil, fuente de la vida, de todo lo que existe. Alejando la bruma que cubría su cuerpo, volviendo la claridad a su piel, permitiendo abrir y brillar sus ojos de dulce miel.

Vuelve nuevamente la tranquilidad a sus corazones,

Gracias al cielo que estas bien, no sabría que hacer sin ti, te amo. –le dice Horseth mientras abraza fuertemente a Elizabeth.

Hijo tenemos que festejas esto con un gran banquete, encenderemos la luz de Alexandria, para que todo el valle sepa de tu regreso

Aguarda madre, antes tengo que hablarte de otra cosa, de algo que traigo conmigo.

Está bien, será mañana, ahora descansen tienen mucho de qué hablar…

 

Al día siguiente, Mirana le espera en la biblioteca, pasa hijo ¿qué es de aquello que querías hablar? –le indica Mirana con gran impaciencia.

Hoseth desenvuelve el cofre de entre unas telas de satín en que lo había envuelto,

¿Un cofre, que es lo que contiene? –le indica Mirana con gran curiosidad

Esperaba que tú me lo dijeras, he intentado abrirlo, pero no lo he logrado, no conozco las marcas que tiene inscritas.

Se acerca Horseth y deja el cofre sobre la mesa

…Estas marcas, hace mucho tiempo que no las veía,  ¿Dónde lo encontraste?

No lo hurte, si eso piensas, fue una encomienda, de alguien que conocí en el camino, - le indica Horseth de inmediato

¿De quién?, le responde Mirana con más curiosidad

Esperaba que eso también me lo dijeras.

Este cofre no lo puede abrir nadie, ni nada, únicamente a quien va dirigido. Este cofre no es de esta tierra como ya te habrás dado cuenta, fue forjado en las estrellas, veamos qué es lo que contiene…

Mirana toma el cofre y le susurra suavemente “Tye-mélane oio”, se abre de inmediato… ¿Qué es eso madre?,  - le pregunta Horseth con gran asombro, esto hijo es una pluma, ¿de qué crees que sea? –le responde Mirana.

De un hipogrifo, o de un alicanto, una arpía o tal vez de un fénix.. – le Responde Horseth sin tener idea

No hijo, ven toma asiento y te contare la historia sobre esta pluma, que viene de más allá del cielo, que es de un ángel, si un ángel y el más bello de todos…

 

Hace 200 años, había una doncella que vivía en las montañas, cada día iba a la cascada a refrescarse, y por un poco de agua para el hogar, un día de regreso  se encontró a un hombre harapiento, su ropa era muy vieja, pero su rostro lucia muy limpio. El hombre se la acerco y le dijo, tenga buen día bella dama, podría decirme dónde puedo encontrar un poco de agua, estoy sediento, con mucho gusto le contesto ella, tome un poco de agua, no muy lejos de aquí (señalando el oeste) hay una cascada y un rio, ahí encontrara el agua que necesite. Muy amable, tenga un excelente día, le contesto él.

 

Al día siguiente se dirigió a la cascada como de costumbre, poco después apareció el mismo hombre del día anterior. Tenga buen día, un gusto en volverle a ver, le digo a aquel hombre, un placer buen hombre, le responde la doncella, y así se encontraron cada día, conversaban hasta el ocaso, aquel hombre siempre le contaba bellas historias, le hablaba de la fe, la esperanza, el amor, del brillo de las estrellas, lo bello que es el mundo,  así pasaron las semanas cada día sin falta, el hombre se presentaba. Ella se enamoró de él, Y así pasaron 10 meses, y el hombre decidió contarle la verdad de donde venía. Hola bella dama, hoy quiero contarle una historia muy especial, la verdad sobre mí, ella con gran curiosidad digo, adelante, ¿dígame de donde viene realmente?

 

Soy un ángel, mi hogar es el cielo, siempre la he mirado, cuando venía con su padre a recolectar agua, hasta que un día decidí bajar y hablarle, sepa usted que no nos es permitido hacer eso, pero no me importo, yo quería hablarle, mirarle de frente. Ahora quiero que me mire como lo que soy, el hombre se pone de pie y expande sus grandes alas, llenas de luz, de magia, de esperanza, era muy hermoso. Quiero decirle esto así como soy realmente, La amo tanto, es usted muy bella, sus ojos no se comparan con las estrellas, pues yo vengo de ellas, y usted es más hermosa que ellas. Su alma están cálida, su sonrisa es la luz que busco cada día. La amo y no me importa quebrantar la ley divina, yo quiero estar con usted por siempre.

 

Yo también lo amo, ya me parecía que usted era muy especial. Era diferente a todos los hombres que he conocido. El ángel la toma de las manos y le da el primer beso, de un amor eterno.

Así pasaron los días, siempre encontrándose en el mismo lugar, permaneciendo juntos hasta el ocaso.

 

Un día se escucha un estruendo, y llega otro ángel ante ellos, diciendo, ¡Kirio tenemos que irnos ahora!, los viles están atacando, y vienen hacia la tierra, tienes que venir de inmediato no podemos hacerlo sin ti, ¿no pondrás a una humana como prioridad antes de tus deberes celestiales o así?

 

Él le responde de inmediato, ya he tomado una decisión, y elijo a ella. El otro ángel insiste, si ellos atacan no quedara nada, ni siquiera ella, ¿lo entiendes?, está bien, kirio acepta sin más opción. Saca la amatista Âmar y se la entrega a la doncella, diciéndole, si corres peligro, si me necesitas, llámame con ella, estaré a tu lado enseguida.

 

Cuídate mucho amada mía, esto lo hago por ti, Tye-mélane oio (Te quiero Siempre). Está bien yo te esperare siempre. Vámonos ya, y ambos ángeles levantan el vuelo hacia al cielo.

 

Al llegar al campo de batalla, era una gran horda de viles, pero como lograron cruzar la barrera, no me lo explico, piensa Kirio. Como comandante, Kirio planea como detenerlos y da las órdenes, ve a un viejo conocido, Hides… ¿así que eras tú?, pregunta con gran asombro. Hides responde, Dime como piensas detenernos, conozco tu debilidad, te quitare aquello por lo que luchas, te daré desesperación.

 

Enseguida Hides abre un portal, Kirio le dice, ¡no te atrevas, no lo hagas!, se lleva algunos viles con él.

Kirio preocupado, pues sabia donde se dirigía. Tengo que irme ahora, no puedes abandonarnos, le dice Milos, Kirio responde, hemos estado en incontables batallas, sabes que hacer, te dejo a cargo de todo, confió en ti, sé que los detendrás. No lo hagas, sabes cuál es el castigo por esto, no es solo perder tus alas…Kirio sonriente le responde… lo sé, Adiós viejo amigo, y se adentra en el portal.

 

Aparecen en la montaña, cerca de la doncella. Con voz dulce Kirio le susurra a la doncella, No te preocupes amada mía, no dejare que nada te lastime, nunca lo permitiré, lo prometo, tu eres mi fuerza, mi valor, la luz que brilla en mi interior, así que no te preocupes, nada te pasara. Dándole un beso en la frente le dice, ahora aléjate, yo me encargare de esto.

 

 Hides, ya lo esperaba, sabía que vendrías, eres tan predecible, y todo por una humana, eres patético, perder todo por ella, jajajaj. ¡Pues perderás también a ella!.

 

Kirio responde con voz firma, terminemos con esto tu y yo, si pierdo harás lo que te plazca, claro, solo si pierdo,  Hides responde, de acuerdo, destruiré todo.

 

Se desata una ardua batalla, entre los dos, hacían a la montaña temblar con tanto poder. Después de un rato, ambos agotados, Hides desesperado grita, ¿porque tienes tanto poder?, ¡al final yo ganare pues aunque muera, tu perderás todo!

 

Kirio decidido en lanzar un último ataque, se lanza contra Hides, intenta bloquearlo con un escudo vil, pero no tiene la fuerza para soportal tal ataque, así que es atravesado por él, volviéndose polvo, regresando a las estrellas.

 

La doncella corre hacia Kirio, lo abraza, está agotado, él le responde con voz débil, te prometí que siempre te protegería y así será,  antes de ser castigado te daré vida, la doncella temerosa dice, ¿de que estas hablando amor mío?, él le responde, por a ver faltado a mis deberes, por haber huido del campo de batalla, por desobedecer las órdenes directas, el castigo es el destierro, y el sufrimiento eterno, pero por ti, porque vivas, será un placer padecerlo, Tye-mélane oio.

 

Jamás podremos volver a estar juntos, pero tú vivirás. Kirio se levanta, se aleja unos pasos de ella, se llena de una luz tan hermosa, era como el sol, le entrego el escudo magno celestial a la doncella, sus alas fueron calcinadas, su lindo rostro dejo de brillar, la doncella comenzó a llorar por ver a aquel hermoso ángel  darlo todo por ella, por verlo convertirse en un monstruo, pero él nunca dejó de sonreírle, la amaba tanto, sus últimas palabras fueron. Te entrego mi vida, Te amare siempre, cada día pensare en ti, jamás me busques amor mío, no podremos estar juntos nunca, ese es el precio de tu existencia, se feliz y brilla en el mundo, mi amor será eterno, adiós mi amor celestial…

 

Él se desvaneció, desapareció, poco des pues se dio cuenta de que estaba embarazada, tuvo un hermoso niño, nunca más volvió a ver a Kirio, o supo algo de él, pero ella jamás dejo de amarle, cada noche mirando las estrellas pensando que el también en algún lugar las mira de igual manera, y sentirse cerca, recordando aquellas historias, aquellos versos que él le decía, recordando aquella forma en que siempre la hacía sonreír.

 

 

… Mirana concluye la historia diciendo, Veras hijo mío, cuando el amor es verdadero, das todo por ello, todo cuanto posees, tu propia existencia por ese ser que amas, así como tu arriesgaste tu vida por Elizabeth, un ángel entrego su propia existencia celestial por amor.

 

Horseth se mira un poco pensativo, guarda silencio un momento, y posteriormente dice,  ¿no solo es una de tus historias verdad madre?, Así es hijo, es nuestra historia, de donde provienes, del porque vivimos muchos años. ¿Entonces ese monstruo que está en la pesadilla esmerada es… mi padre?, así es, pero era muy hermoso en aquel entonces, esta pluma es de tu padre, ahora sé dónde encontrarle… Horseth responde inmediatamente, ¿No estarás pensando en ir, o si madre?, dijo que no le buscaras, que no podrían estar juntos otra vez, quien sabe que pueda pasar, Lo se hijo, no te preocupes, mira que ya se hizo tarde, ve con Elizabeth, ella aún está débil…

 

(Quiero verle de nuevo, ver de nuevo a mi ángel bello)…

 

Continuara en la Tercera Parte.

 

< -- NeoSan -- >

  • Autor: NeoSan (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 19 de junio de 2017 a las 09:19
  • Comentario del autor sobre el poema: Una Historia, hecha en 3 partes, esta es la segunda parte La historia de la pluma. Omití unas cositas, o se me iba hacer muy larga. La tercera parte a ver cuándo me dan ganas de escribirla. Espero les agrade. Cuando el amor es verdadero, das todo por ello, todo cuanto posees, tu propia existencia por ese ser que amas. Primera parte: https://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-446665
  • Categoría: Fantástico
  • Lecturas: 29
  • Usuarios favoritos de este poema: nelly h, Estanislao Jano, Raquelinamor.
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Comentarios1

  • Anitaconejita

    “Tye-mélane oio” emblemático!! este queda grabado, por cierto nunca hay finales felices alguien tiene que sufrir, veremos que pasa....estaré pendiente
    Muy bien Neo



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