En la banca de la escuela

     Te das cuenta que no muchos desviaran su andar para saludarte o para si quiera enviar una sonrisa, porque los datos cuestan y un emoticon no se lo das a nadie, ni a un viejo amigo, con recuerdos grabados en su espalda. Pero que tonta me escucho, (o si te tocó leer esto, que tonta o escaza de palabra he de parecer) bien puede tenerlos grabados en su brazo, codo, hombro, frente, cara, y ¿por que no? Hasta en los pies o en su planta, para que al pisar no solo deje mancha de la mugre de ayer, aquella que agarro al caminar a la parada del camion o la que se encontraba en el carro de su mama (aunque casi siempre es del papa,pero la mama le pone el sabor) y por ultimo pero no importante, porque se vale sonar cliche de vez en cuando, ¿por que no en el corazon? Puedo decir que si leo espalda o corazon, cual sea de los dos, hara que diga o sienta algo bueno de aquel escritor, refiriendome claro a su escritura. Pero entonces ¿donde queda el resto de mi anatomia? Tambien tengo brazos y piernas, gracias a Dios, y tambien estomago, pancreas y riñones, dos para regalar. Entonces ¿que parte de mi, externa o interna, produce la emocion necesaria para que entiendas y voltees y solo mires? ni observar te pido, solo pido una mirada, que si viniera acompañada con una sonrisa no me quejaria, hasta diria que alegraria mi dia, quien diria que rimaria. Pero no lo haras, ¿no es así? No observaras, ni mucho menos miraras a esta persona que, con una mejor redaccion, te dice que carga con memorias, en las cuales tu lograste crear maravillosos tatuajes, los cuales solo observo en esta banca, pues cargo con ellos, preparate, en mi, tan insignificante como suene pero es que yo formo el pedazo de corazón que me tocó y trozo de espalda que se repartió, y es en mí, en todo este conjunto que los anteriores tatuajes, que hasta veces considero paisajes se encuentran guardados. Asi que no te preocupes, no desvies tu ruta por esta pequeña banca, al fin y al cabo, la escuela cuenta con muchas de ellas.