El café de la mañana le da un toque amargo
al día y endulzarlo con azúcar es comenzar
la mañana con mentiras.
Dejarse llevar es como dejarse querer,
un fortalecimiento del alma en una debilidad
manifiesta, el clamor es claro: "¡Quiereme!"
Los políticos nos enseñan a gobernar la vida,
mintiendo. De hecho, es imposible si quiera
imaginarlo. Nos podrían enseñar a amarnos,
pero entonces se llamarían "papás" y no sé
a quién votaría.
Me acabo de dar cuenta que escribo por falta
de amor, la poesía me enseña a dejarme querer,
y el café de la mañana me ayuda a soportar
tanta mentira, acaso iba para politico y acabé
como poeta.
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Autor:
Glomo (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 5 de mayo de 2017 a las 04:11
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 31
Offline)
Comentarios1
El café endulzado con
un loco amor...
que es o que fue.
Bellísimos tus versos!!!!
Abrazos amigo.
Muchísimas gracias por tus palabras, Héctor. Un abrazo.
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