LA FLOR ROSA

Mariss Burton

Mundo vacío fuente de oscuridad,

haz puesto en mis manos una flor de color rosa,

aún no está marchita pero pronto lo estará

como lo que conocí alguna vez y que ahora en la tierra está

 

Mi rostro ha estado seco por semanas,

mi corazón ha estado vacío,

siento las miradas de las almas enterradas

y no derramo lágrimas por ellas

 

Sólo sostengo la flor que me fué otorgada,

las yemas de mis dedos la tocan,

mis ojos la observan,

pero sé que pronto estará muerta,

por siempre derrotada.

 

La flor se marchita lentamente mientras la observo

y no se puede hacer nada,

su destino fué marcado y yo sólo espero,

espero el momento de enterrarla.

 

Pero no derramo lágrimas,

mi corazón no siente nada,

es mejor que la flor supere la vida

y que no se marchite de forma infinita,

es mejor irse rápidamente que sostenerse en mis manos eternamente.

 

Cuando se ha marchitado,

la flor ha perdido el color,

se ha convertido en nada,

y yo la miro extrañada,

el color rosa que ha desaparecido

me dice que la flor se ha ido,

y en mis manos estoy sosteniendo la nada en sí,

la inexistencia y la incertidumbre de morir.

 

La miro aliviada, y lo único que quiero es tirarla

y caminar lejos,

pero dedos  en sombras extrañas apuntan hacia

mi rostro aliviado y seco,

ojos acusadores me miran con recelo

y corro rápidamente esperando llegar muy lejos

 

Rostros extraños susurran oraciones inentendibles,

posan sus rodillas en el suelo y llaman a Dios.

Dios no los escucha porque no está ahí,

porque está lidiando con su propio dilema existencial

y con un luto sin final.

 

 

Llego al abismo y salto,

 Puedo ver una extraña figura,

Soy yo, diciéndome a mí misma que he perdido la cordura,

Mientras caigo, lo único que puedo percibir es negro

y un dolor en mi cadera,

el dolor me exige respuestas

 

Siento un dolor en mis muñecas, y

sigo cayendo.

No sé cuando dejaré de caer,

quiero detenerme

pero no puedo.

Todo a la vista es negro,

lo único que veo es mi figura cayendo

sin saber cuando llegaré al fondo.

 

 

En ése momento, no soy diferente a la flor,

mi destino fué marcado

me estoy marchitando infinitamente,

llegaré al abismo, moriré, y perderé el color.

No se derramarán lágrimas,

y estaré enterrada, al lado de la flor.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

  • Autor: Mariss Burton (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 21 de febrero de 2017 a las 21:07
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 62
  • Usuarios favoritos de este poema: tamypaloma, PeƱafuente.
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos Novedades semanales




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.