Una muchacha rubia
estaba en un balcón,
asomaba su cabeza
por ver llegar a su amor.
¡Ya viene la calle arriba!
¡Ya llega aqui su olor!
Así decia la muchacha
pero su amor no llegó.
Su amado se fué ala guerra,
ella cual Dulcinea se quedó,
esperando a su caballero andante,
y el en vez de caballo,
por montura usa un tanque,
cómo espada un fusíl,
y casco en lugar de bacín.
Era un comandante quien la calle subia
con una carta que así decia:
Querida mia te espero en el cielo,
una bomba traidora me subio en su lomo,
como un corcel blanco,
con crines de terciopelo
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Autor:
remita.p (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 24 de abril de 2009 a las 19:55
- Categoría: Triste
- Lecturas: 99
Offline)
Comentarios2
Tristemente bello,...Saludos de luz
Me ha gustado mucho tu poema, a pesar de los fallos de puntuación, fácilmente subsanables. Parece una copla inspirada en el Quijote. Me ha encantado esa alusión al bacín, o al yelmo de Mambrino. Muy imaginativo.
Saludos, Remita.
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