No necesito oír un te quiero,
todos los días,
necesito que muerdas la boca,
necesito mi piel tatuada en tus labios,
que desaparezca la poca ropa,
sacar mi corazón a pasear, sin cadena
y que te subas a un sueño
y ya elegiremos la estación de parada.
Porque es tan difícil vivir,
entre tanta muerte, para tan poca vida
tanto beso y tan pocas bocas
tanta lágrima, tanto pañuelo sin dueño,
que a veces pienso
que tanto que me amas
y tampoco que me necesitas.
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Autor:
Araceli Vellber (
Offline) - Publicado: 25 de noviembre de 2016 a las 07:51
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 58
Offline)
Comentarios2
Un recocer lo mucho que se ama y del deseo que lo envuelve.
Y lo frío en las palabras sin muestras de afecto.
Un gusto de lectura.
gracias
Gracias a ti...
por corresponder con tu amistad.
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