Nostalgia.

Flor Erendira

No te quería querer con tus heridas aún abiertas

Heridas de un pasado empolvado, viejo y empedrado

No quería que me quisieras con las yagas aun sangrantes

Yagas que me dejaron un ardiente amor vagante

 

Y por no querer me quede queriendo

Y por no esperar el preciso momento

Me esperas todas las tardes al viento

Y a tu lado un amor que te dejo el tiempo

 

Y solo culpo al destino silencioso enemigo

Y lo culpo por su imposibilidad de defenderse conmigo

Y lo culpo por culpar a alguien y apaciguarme el alma

Y lo culpo para tenerle una razón al pobre corazón

 

Sí ¡pobre corazón! Se ha quedado sin razones

Se construyó una muralla impenetrable de amores

Donde nadie le ve nadie conoce sus primores

Nadie sabe que por un mal de amores las heridas se cose.

 

 

Flor Hdez. México.

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Comentarios8

  • FABIO BOHORQUEZ RODRIGUEZ

    Flor:

    La nostalgia de tus versos
    son del pobre corazón.

    Profundo poema.

    Un fuerte abrazo.

    • Flor Erendira

      Abrazos también para ti Fabio :* Gracias por pasar a visitarme.

    • JAVIER SOLIS

      Vaya "Hasta que por fin parió Paula" dí cese cuando algo se esperaba con ansiedad y al fin llegó. Extrañaba tus inspiraciones diarias y nos entregas unos lindos versos como "No quería que me quisieras con llagas sangrantes, llagas que me dejaron un ardiente amor vagante" lindo en verdad. Con cariño
      JAVIER SOLÍS

      • Flor Erendira

        Jajajaaj Javier!!! Nunca había escuchado ese dicho, ¡está chevere! Gracias Javier por tu siempre bienvenida compañía. Besos.

      • Fabio Robles

        Unos versos muy lindos con una filosofía que tiene lógica, aunque en el amor es difícil porque de lógica no entiende el corazón....
        Un gusto leerte, un abrazo

        • Flor Erendira

          Sí, a favor, el corazón es aferrado y testarudo, ¿Qué le vamos hacer? jaja Gracias Fabio besos.

        • Maria Hodunok.

          El corazón no sabe de razones Flor.
          Y tus letras están muy tristes, a pesar de su belleza.
          Una impotencia del alma que ama y lo grita...pero no quiere ser escuchada.
          Grandes tus letras amiga, duelen, pero son intensas.
          Un honor leerte.!!!!

          • Flor Erendira

            ¡Honor el mío Maria! Tener aquí tan linda persona, sabes que te admiro mucho. Abrazos!!

          • kavanarudén

            Precioso poema
            Ese corazón, pobre corazón que no ha cometido ninguna otra falta que amar, mas jamás el amor es falta, ni mal, ni pecado.
            Un precioso poema donde destila el amor.
            Un placer leerte
            De mi parte un fuerte abrazo
            Kavi

            • Flor Erendira

              Kavanarudén, que distinto se ve en esa foto, si no es por la sonrisa ni lo reconozco 🙂 Gracias por sus palabras, me gusto "jamás el amor es falta" Abrazos grandes también para usted.

              • kavanarudén

                🙂 gracias y puedes darme del tú, con toda confianza. Como mejor te parezca. A mí me sale más darte del tú, espero no te ofenda. Pero siéntete libre de nombrarme como gustes.
                Un abrazote y mil bendiciones
                Kavi

              • Hay 1 comentario más

              • Estanislao Jano

                Hermoso poema amiga. Disfruté de su lectura.

                Besos

              • Mael Lorens

                El Amor hiere y cura constantemente nuestras vidas y va dejando cicatrices en el Alma entera buen Poema 👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻

              • Wellington Rigortmortiz

                "crucificada mi alma
                en un árbol esta aferrada
                a su inocente naturaleza,
                en este viejo bosque
                la oscuridad es perpetua,
                brujas del amor
                con su mágico elixir ritual,
                extraen de mi esencia
                lacrimosa, mientras ellas
                se vuelven solo
                recuerdos para mí,
                un dolor inexplicable,
                mordaz, va cauterizando
                cruda y cruelmente
                con su incandescente
                calor esta profunda herida
                abierta de par en par
                como las puertas del cielo,
                o quizás
                de un posible infierno,
                el corazón enhebrado
                por miles de dagas
                late lentamente,
                desesperado
                y ahogado en sangre;
                una espada encajada
                está en mi costado
                con amor, dolor y traición,
                respirar es complicado,
                para no morir, fingir
                que no lo puedo hacer bien
                es debido a tus besos
                que desaprensivos
                cruelmente me asfixian,
                así la mente maquina
                estúpidamente
                el hecho de que hayas muerto,
                de que te hayas huido de mí;
                malditos bellos recuerdos,
                como carcomen
                lentamente mi ser,
                maldita hermosa figura
                que cada día sarcásticamente
                te refugias en mi alma
                a la cual ya no amas,
                solo lo haces
                porque soy el único
                que jamás te pudo
                y podrá hacer algún daño,
                aquí sigo, seguiré,
                hasta más allá
                del final de tus días
                dándote el refugio
                que tanto necesitas,
                esperando el instante
                en el que retorne a ti
                tu cordura, tu sensatez,
                tu sensibilidad,
                tu bondad, tu verdad,
                tu lealtad, tu fidelidad,
                tu respeto, tu honestidad,
                naturalezas que compartiste
                y viviste de mí". Wellington. Me encanto tu poema, un abrazo



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