Amada, estoy sentado aquí; si vieras
que las mañanas ya no son las mismas
desde ese marzo tenue, nuestros prismas
no dan su luz, y cómo aúllan fieras.
El invierno hizo suyo, lo antes nuestro;
el atrio triste llora, si supieras
de mi congoja. ¡Vuelve cuando quieras…!
y quita de mi lomo este cabestro.
Apronta tu regreso amada mía,
y aparta el basilisco de mi seno
que ahoga mi dolor en su veneno.
Hay sombras de una cruel melancolía,
y ese sollozo abstracto femenino.
¡Regresa..! Y no equivoques el camino.
Derechos reservados de autor
David John Morales Arriola
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Autor:
John Morales (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 31 de agosto de 2016 a las 10:14
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 81
- Usuarios favoritos de este poema: Mauro Enrique Lopez Z., nelida moni, Beatriz Blanca, Maria Hodunok., Lebusla, Marc Tellez Gonzalez, JoseAn100.
Offline)
Comentarios8
Qué maravilla de poema. Cuanto amor y cuanto anhelo en sus letras.
Me encanta!!!
Abrazos.
Bello John, placer pasar
Cariño amigo
Nélida
La demora crea expectativa y en el poeta enamorado se convierte en versos. ☺ Magistral, como siempre.
Me resulta muy placentero poder disfrutar de tus poemas. Dios ilumine siempre tu musa.
Cariños, amigo
Triste y profundo John, (un tema que escribí el 19 de este mes).
Tus letras parecen muy reales.
Sos magistral, un poeta de verdad.
Que honor leerte hijo del alma.
Cariños inmensos.
Muy buen poema con dosis de nostalgia y espera . Saludos John
Muy bello jhon es un placer leerte ..tus letras tienen muchas fuerza ..un honor estar aqui .abrazos
El deseo de un retorno muy bellamente expresado dentro de la perfección de versos endecasílabos.Felicidades.
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