CORRE JUDAS

Para Matías

Corre desdichado por el lóbrego pedregal;

De cuando en cuando una mano lleva al rostro

Por inercia, sintiéndose un monstruo,

Corre por el conocido y hoy sombrío paisaje

Pues compró por precio alto, a la miseria, su pasaje.

¡Corre sin detenerse el que antes amigo era!

El que el pan compartía con el maestro

Que de rodillas aprendió el padre nuestro,

Hoy corre desventurado sin consuelo

Mientras trastabilla y prueba el suelo.

¡Corre impulsado por una fuerza desconocida!

Antes su amor por el maestro lo constreñía

El dolor y la tristeza no conocía,

Era el discípulo amado y querido

De honra, nobleza y autoridad estaba vestido.

¡Corre miserable pecador infeliz!

El dolor lo ha segado sin compasión

Mientras pasa al lado de los que fruñen el ceño sin dilación,

Corre que para ti, tu alma jamás hallará consuelo

Créeme, si vivieras, te tocaría probar el infierno.

Corre traidor Judas incomprendido;

Sin reparo tu oportunidad abandonaste

Y al tormento por descuido, entraste,

Corre nadie comprende tu sinsabor

Y déjales que murmuren a costa de tu dolor.

¡Corre tú que debiste ser contado entre los doce!

Cuelga la soga que no estás amando

Prueba la bendita paz que estás añorando,

Y deja Judas, "El alabado", que Matías tome la sagrada comisión

Pues su nombre “regalo de Dios” sí llegará a la celestial mansión.