carta número ocho: apenas te has ido y...

Viernes y Sabado, agosto 5 y 6 del 2016

Mi rubi, mí linda, mi niña.

Acabo de partir de tu lado, apenas hace escasos minutos eh soltado tú mano. Y sabes que pienso; en cuanto te amo, cuando te volveré a ver, necesito de inmediato otro encuentro; uno más duradero, que tal, uno que dure, lo que el universo.

Te necesito, te quiero, necesito ver tu  cara, que hermosa cara, de niña, de angel, necesito besarla, toda, tus mejillas, y los ojos, y las ojeras de tus ojos, como quisiera ser algo de tú rostro, para vivir ahí, para amanecer y dormir, ahí, para alimentarme diariamente, a todas horas de ti.

Como amo tú cuerpo, tan delgado tan perfecto, como ansió abrazarlo, olerlo, fundirnos en un abrazo, que nuestros suspiros, y corazones, tomen un mismo paso, que felicidad a tú lado, y no nos olvidemos de tú hermoso y claro vientre plano, cuantos días me eh pasado besándolo, admirándolo, recostado sobre el, dejando que pase la vida, dime ¿qué puede importar? si te tengo a mi lado. Que pase la vida, que pase la muerte, que yo me encuentro en un estado más elevado. Aquél en el cual sólo puedo estar enamorado.

Por eso ven ya! Te lo exijo! Ven a mi, aquí a mi lado, que quiero darte todo aquello que me eh guardado, no ves que te eh estado esperando, ahora cómo, dímelo ¿cómo puedo pasar un día sin ti a mi lado? Es una tortura y me niego y te pienso, te recuerdo, te sueño, estás en mis fantasías, en las melodias, y en mi alma tatuada con tu cara de niña.

Eder Guerrero