Tu canto (A Berioska Leyva)

Tu canto
Tu preciado canto en Barranco
Tu canto que bebo con fiel juramento
Tu canto en el que duermo como un tierno niño
Tu canto como el onix que cura
El silencio y la derrota
Tu canto que lloro , celebro y declamo
En plazas imaginarias
cercadas por harawis y bardos
Desde el día en que escuché tu canto
LLegan golondrinas volando , volando
Sobre nubarrones sempiternos
Y ya sus alas quebradas
Se curan con tu canto
Vigoroso, apacible
Con aromas de rosas turquesas
¿Acaso la voz que nos entregas
das inicio
A una larga historia venidera
Donde nuestro tiempo
será gloria compartida?

Qué importa aquella pregunta tediosa
Unas estrofas lo son todo
En el carrusel del destino asolapado
Más aún si talento nos sobra
Para evocar meridianos, ecos , jardines y cristales
Viajando sin rumbo limitado por confines

Qué importa aquella pregunta tediosa
Cuando tejes el estilo que me nombra
Condecorándolo con gallardetes pasionales
Tu preciado canto en arrayanes

Del presente indiscutible

Oh tu canto sacrílego ingente
Rosado como la cereza que crece
Azul como aura infinita insurgente
Manecilla del reloj anime