ENANITOS DE PASEO (Historias del Bosque Encantado)

Blancanieves


AVISO DE AUSENCIA DE Blancanieves
Espacio de ausencia temporal

 

 


Jul 2016

 

*

 

*

 

Caminan los enanitos de la manita,
caminan y se alejan de su casita.

 

*

 

Sonríen y se entretienen viendo el paisaje:
los ríos y las colinas de aquel paraje.

 

*

 

Van en la compañía de Blancanieves
y, a ponerse travieso, nadie se atreve.

 

*

 

Se acercan a la orilla de un manantial
donde las aguas lucen como el cristal.

 

*

 

De plateadas formas los peces nadan,
en tanto que la lluvia, cae en cascada.

 

*

 

Se adentran en el Bosque y, recelosos,
caminan asombrados y temerosos.

 

*

 

Un ciervo los observa del otro lado,
mientras, un oso trepa el acantilado.

 

*

 

Se aproximan al borde de un precipicio,
¡no se caigan, enanos, o habrá estropicio!

 

*

 

Descienden con cuidado al verde valle,
hermoso cual ninguno donde los haye.

 

*

 

Las nubes cruzan lentas y blanquecinas,
y el viento las dispersa y arremolina.

 

*

 

En esa zona andina, formas extrañas
se acercan y se alejan de las montañas.

 

*

 

Es el vuelo del cóndor, que les inquieta
dibujando perfiles de su silueta.

 

*

 

Las sombras se aproximan formando un velo,
y los enanos sienten un desconsuelo.

 

*

 

La hora del regreso los entristece;
les queda un largo trecho, y ya anochece.

 

*

 

Van llegando al bosque de sus ancestros,
y preparan el rezo del padrenuestro.

 

*

 

Se acuestan en la cama algo cansados,
mas, sabiendo que fueron afortunados.

 

*

 

Alguno, en su sueño, se siente un héroe
a la caza del oso entre la nieve.

 

*

 

¡Colorín colorado, roncando están!
¡Los enanos del bosque se dormirán!

 

*

 

Contentos quedarán al despertar,
sabiendo que este cuento les va a gustar.

 

*

 

*

 

Propiedad de los enanitos.
Son sus derechos.

 

; -

 

Autora:
Blancanieves.

Ver métrica de este poema
  • Autor: Blancanieves (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 19 de julio de 2016 a las 14:41
  • Comentario del autor sobre el poema: Queridos lectores y amigos, los enanitos del Bosque Encantado están contentos de ofrecerles este cuento que pueden leerle a sus peques, y les desean una feliz tarde. Gracias por visitarnos. ¡Saluditooos a todooos! Blancanieves.
  • Categoría: Cuento
  • Lecturas: 101
  • Usuarios favoritos de este poema: nelida moni, Mauro Enrique Lopez Z., Lebusla, Edmundo Rodriguez, rosamaritza, María C., Viento de amor.
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Comentarios7

  • Marah

    Hay calidad y belleza en tus letras, felicidades
    Un abrazo amiga

    • Blancanieves

      Gracias, amiga. Muchas gracias, Marah. Saluditooos !!!

    • nelida moni

      Bello y me quedo muy feliz que están a salvo todos mis amigos
      Felicidades Blancanieves, que pases
      una bella tarde en tu bosque encantado
      Cariños
      Nélida

      • Blancanieves

        Por suerte, llegaron bieeeen !!! Otra bella tarde, Nelidaaaa !!! Saluditos cariñosooos !!!

      • mariano777

        ...me encanto el talento de su simpleza...
        adolfo

        • Blancanieves

          Bueno, pues, es un poema-cuento modestito en estofas de versos pareados. Los enanitos son capaces de estas y otras travesuras, don Mariano.
          Blanca Nieves es mi nombre. Adolfo era el marido de la hermana de una de mis tantas cuñadas, ¡jajajajajaaaaa! Simpático don Mariasno... Saluditooooosss !!!

          • mariano777

            EL PIRATA Y LA SIRENITA

            (cuentito infantil)

            Navegaba de perfil y sin rumbo fijo, con agua calma o con mar difícil, un bizarro pirata enamorado de la Luna.

            Por fuera asustaba pero tenía el alma de plata y su corazón todo lo daba.

            Se paseaba por la cubierta con el catalejo y no observaba las galaxias porque no conocía su existencia y de todas maneras el instrumento no alcanzaba, pero si miraba a las muchachas cuando se acercaba a las playas y a las sirenas cuando tomaban el Sol en la isla que habitaban.

            El casco de su barco estaba hecho de roble con toneles de vino noble, que conservando su regio aroma perfumaban desde la popa hasta la proa.

            Las velas de su bajel eran de papel y el era cocinero y era timonel. Resolvía sobre los rumbos, miraba la brújula y se enfrentaba a los vientos.

            Y era más valiente que el pirata de Espronceda

            Con una escoba de peces barría la cubierta cien veces, desde el alba hasta el anochecer. Y le ocupaba tiempo el cuidado del velamen que con la lluvia se empapaba y con el viento se rasgaba. Tenía su barco dos cañones por banda de porcelana de la China que eran ornamento tanto de de babor como de estribor. Y por frágiles y bellos no disparaban pólvora los cañones aquellos, sino por el contrario los lustraba el pirata a diario con seda estampada, como la que lucen las bellas damas italianas.

            Llevaba el aventurero una barba desgreñada que era pelirroja y entrecana. Un ojo era de esmeralda y tenía un diente de rubí y otro de diamante.

            Portaba espada de juncos con puño de cristal y siempre supo enfrentar hasta al más fiero vendaval.

            Donde le faltaba la mano se veía un garfio de oro bien lustrado que tenia la punta engarzada con una perla que encantaba.

            Calzaba bota en una pierna con la suela agujereada y la otra se apoyaba en una pata de madera colorada.

            Acariciaba su piel el aura que empujaba su bajel y buscaba afanoso mirando hacia la Luna un beso ardoroso.

            Era apasionado este pirata y habiéndolo llamado una sirena con su canto claro de ella quedo prendado olvidando que estaba enamorado, y aquella se lo llevo raptado al fondo del mar.







            Pero la Luna celosa conociendo historias de barcos que se estrellaban en las rocas filosas extendió sus brazos de nácar brillante y rescatando al bucanero inconstante de la perversa sirena, devolvió al pirata a su nave. Y queriendo complacer al navegante le regalo velas de seda fina para que cambiara las de papel y le dio alfombras de Persia para que adornara su bajel.

            A pesar de la atenta mirada lunar una sirenita muy bonita que renegaba de la maldad de las demás sirenas y que sonreía y se sonrojaba se acerco al pirata y acariciándole la barba hirsuta le dio un beso de amor dejándolo enamorado para siempre al intrépido aventurero del mar.

            Desde entonces jamás se separaron y vivieron juntos esa aventura enamorada, el pirata que tenía una pata de madera colorada y la sirenita que reía y se ruborizaba.

            Ambos emprendieron el viaje sin fin a la mítica región de Trapalanda y en esa eterna luna de miel no comieron perdices porque no encontraron pero fueron muy felices.

            Colorin…colorado…

            …………ADOLFO

          • Hay 1 comentario más

          • Lebusla

            A que cuidar esos enanitos...
            Saludos.

            • Blancanieves

              Usted, me ayuda, don Lebusla ??? Son traviesoooos !!! Saluditoooos !!!

            • Edmundo Rodriguez

              Querida Amiga ,
              Encantador cuento ,
              y maravilloso paseo ,
              los acompañè .
              Mi cariño , y
              Mi càlido Abrazo .

              • Blancanieves

                Nos alegramos que a su niño interior le haya entretenido, don Edmundo. Un saludito cariñosoooo !!!

              • rosamaritza

                Una delicia al regalarnos estos momentos que cual niño disfrutamos, gracias mi querida amiga.
                Cariños rosamary

                • Blancanieves

                  Gracias a usted, Rosamary por visitarnos y dejarnos su conrisa. Saluditos cariñosos hasta Venezuelaaaa !!!

                • María C.

                  Vaya usted de paseo con sus enanitos,
                  por favor no me los deje solitos,
                  ellos quieren tener a su Blancanieves, siempre al ladito.

                  Me haces inspirar, un abrazo
                  inmenso



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