¿Quien ordena al ordenador?

¿Que es vivir? ¿Sentir los latidos del corazón?

¿Tomar un autobús con rumbo a ninguna parte?

¿Levantarte sin alegría siguiendo la rutina diaria?

¿Hacerlo todo sin arte y solo por obligación?

Tanta desgana, tanta desidia que ninguna ilusión compartes,

una vida así, es vida vacía, sea breve o centenaria.

Los grandes pensadores, mucho antes de la enciclopedia,

inventaron la aritmética y la geometría,

llenaron el escenario con el drama y la comedia

ý enriquecieron la vida con la ciencia y la filosofía.

Faltaban todavía dos milenios,

para llegar a los ordenadores,

esos fríos almacenes de datos.

Se acabaron los grandes genios,

a veces de vida breve, pero insignes autores,

amantes de la duda, y enemigos de lo exacto.