Estimados amigos de Poema del Alma: Debido a vicisitudes muy extensas de relatar me vi alejado de la página, hoy intento regresar, paulatinamente iré subiendo algunos poemas que ya publiqué, por lo que les pido paciencia, pues es por ahora todo lo que puedo hacer, gracias por vuestra comprensión.
Oración de una madre soltera
¿Qué te diré, Señor, cuando te encuentre
en el juicio que dicen que hay después de la muerte?
¿Podré justificarme, tal vez con palabras,
exponiéndote todos los hechos de mi vida...?
(La gente por mí dice: - “¡Es una perdida!”)
¿Qué te diré, Señor... que amé con el alma?,
¿qué aposté mi corazón, todo, a una partida?,
¿qué jugaron por mí, porqué desprevenida
confié, entregué, creí?... y ahora dicen
por todas partes de mí... ¡qué soy una perdida!
Yo acaricio las sienes pequeñas de mi error,
hecha carne y sangre en el nombre del amor...
él me encuentra todo el tiempo en que me necesita
(¡él no dice que su madre sea una perdida!)
Tal vez Tú me condenes, como me condenan todos
los que dicen que mi alma está llena de lodo...
yo continúo amando, porque amar es lo que quiero,
aunque el amar me termine llevando al infierno...
Perdóname, Señor, te diré entonces...
si es verdad ¡que Tú perdonas a los muertos!
-
Autor:
Raúl Daniel (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 8 de julio de 2016 a las 23:03
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 21
- Usuario favorito de este poema: el poeta del abismo.
Offline)
Comentarios1
Si el amor nos entregaron en un sentido glorioso, no se necesita esposo, porque eso lo instituimos los hombres. Un certificado no nos unió solo el amor une así uno no presume que la mujer es de uno, como propiedad elegida pues no se es perdida cuando al amor responde.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.