Fin de la depresión.

Raan

FIN DE LA DEPRESION 

No me haces caer porque ya nada nada aumenta mi rutinario dolor, presiento que estar así es un veneno más largo, fuerte y cansado que llorar a mi edad.

 Me hago una con el arrastre de mi triste vida, fui a descansar el alma para ver si podré superar mis fracasos sin pedir ayuda.

Soy una farsa, y que la gente me diga que se puede todo es una mentira

Ser de nuevo la antropóloga optimista y desear un mundo mejor al unirme con fe a los jóvenes y sabios para marchar a la guerra por la libertad contra el horario de vida establecido… eso ya no puedo.

Perdónenme por no ir mas con ustedes, pero ya está todo escrito y mis letras no tachan lo que el tiempo ha escrito. No soporto ir a luchar hoy para mañana simplemente seguir con lo de ayer.

El insomnio no marcha, se queda a tu lado.

Los abrazos no son eternos y los gritos no te llenan.

Y lo nuestro no existe.

No se puede dormir bien al saber que nadie vendrá a salvarte y no se puede vivir sabiendo que no encuentras la fuerza para sanarte.

Como un terremoto en una isla desierta, sin hogar firme, lo bueno y malo de mi vida se derrumbó...Y nadie lo sabe. 

Con la primera tormenta me ahogué. ¡Estoy muerta!, nadie lo sabe… ¡Porque soy una farsa!, y mi cadáver mantiene una sonrisa que responde” bien, ¿y tú?”.

Vivo entre un cruel mar con palabras hirientes que me arrastraba hacia las costas ajenas con esperanza de no estar sola y me regresa en una nueva tormenta que me recuerda donde se está cavando mi tumba. 

Ya no me apoyaré en ti ni en nadie, optaré por volar sola, no te necesito más en mi vida.

Pero sé que estaré más satisfecha si encuentro otro significado a tu nombre. Mañana diré que nada me duele, ni duele saber que pude ser yo la que esté contigo, ni duele saber que en realidad nunca me diste esa oportunidad, no te dejaré mi dolor para tu ego... Si lo quieres tendrás que encontrarlo entre el polvo de lo que dejan mis demás problemas.

A todos mis pedazos los subirán a las gaviotas de plata con los ángeles y hacia el sol volar.

Ser menos que polvo y quemarme en un respirar. Volverme espacio y tiempo entre las nubes y el mar. Ser un poco de luz y gravedad.

Tal vez encontrar un Dios lejano al que dice la gente y demasiado indescriptible para llamarle Dios, algo que sea como el cielo.

Que solo él cielo es el mismo siendo distinto, nunca igual e infinito a donde lo sigas, poseedor de nada y aun así es demasiado, da suficiente al alma y ni así se puede tocar

Que sea como cielo, cielo que se describe como el espacio, el espacio que es todo y yo que quiero ser parte de él.

 

RAAN.

  • Autor: Raan (Offline Offline)
  • Publicado: 6 de julio de 2016 a las 04:53
  • Comentario del autor sobre el poema: Mi primer aporte, me gustaría saber qué opinan lo agradeceré mucho.
  • Categoría: Triste
  • Lecturas: 50
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