El poeta.ha muerto tantas veces
en cada uno de sus poemas.
Que cada verso esconde un epitafio
escrito con la sangre de sus venas.
El poeta. es fantasma de sus recuerdos.
y anima de sus amores.
Amores ocultos en cada latido
y en cada sollozar oscuro,de la oscura noche.
Porque el poeta es una ensoñación viva
de su propio sentir.
Que camina bajo el foco de la luna
con el corazón entre sus manos,
Buscando entre los astros su perfil oculto.
Y su oculta sombra.
Sombra de sus propios sueños.
Sueños que se volvieron raíces de humo
en un jardin de auroras.
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Autor:
Debora Pol rodriguez (
Offline) - Publicado: 24 de junio de 2016 a las 18:53
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 30
- Usuarios favoritos de este poema: nelida moni, sudakaloko, Viento de amor.
Offline)
Comentarios1
El poeta muere en una eterna vida, surge inmaculado su alma a través de los tiempos, y sus letras cada día tienen más vida.... aunque el poeta haya muerto.
Hermosa reflexión
Saludos
Muchisimas gracias Nelly 🙂
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