Las luces, las estrellas...verdad y cosecuencia

Las luces, las estrellas...verdad y consecuencia

 

Sentado y solitario sobre la dolida roca,

mirando desde arriba,

volví, volví a ver correr el agua

la que algún día quise ver en sueños,

aquellos años...tantos años.

Años de vuelo viendo pasar el agua

en medio del páramo seco.

Imaginando vida, vida nueva...

donde no había vida...solo esperanza.

 

Vi una vertiente verde, verde y plata

que nació sin llamarla,

esa que surge de la nada,

sola desde la torre de piedra,

del cerro sin voz;

porque el sol le está quemando el grito

- su llamado.

Ese mismo dolido grito

que ha dejado sin verde y plantas,

sin árboles, solo con sed de frutas...

 

Hoy he vuelto a ver esa corriente de agua

parida desde el grito del polvo de la tierra

- del calor que abraza...

Plantas, plantas que quisieran renacer

desde su sed de vida...

Gota a gota simple pero que caiga,

lluvia imprevista, gota imprevista,

lágrima...que humedezca el alma.

 

Sentado en mi terraza vi la flor

pintada en una planta 

que yo algún día imagine

y la soñe planta.

También soñé los árboles robustos,

los soñé pintados en medio del cerro seco,

los soñé creciendo

y también los vi muertos combatiendo

con la sequía en el amarillo cerro.

 

Crecieron lento...combatiendo crecieron

y hoy dan sombra...sombra larga,

sombra de plata y sonrisa de aurora clara...