No.

No es fácil la distancia cuando uno se acostumbra. Lo que nos mata es la costumbre, la espera de lo que jamás va a llegar por "culpa tuya" y se transforma en culpa porque en algún momento deseamos a esa persona, pero esa persona quizás no nos desea(y asi en cuanto a la otra). Esa palabra "quizás", que hubiera sido si, que pasaría si. Ya no te atormentes más, es mentira que si queres en verdad alguien vas a volver a buscarla. Si la querés, desde un principio, nunca la habrías dejado.