Cuantas veces he de morir
para resucitar una y otra vez
en tus manos tiernas
donde el hastío de mis, te quiero
resbalarán por tus mejillas
entre lágrimas y suspiros.
Me mato..., cada vez
en ese beso enamorado
sin explicación ni despedida
quedo colgado, testigo cruel
de este amor desdichado
que de vivir se ha cansado
en el último, te quiero
- 
                        Autor:    
     
	Esteban Couceyro (Seudónimo) ( Offline) Offline)
- Publicado: 14 de marzo de 2016 a las 09:06
- Categoría: Amor
- Lecturas: 33

 Offline)
 Offline)
 
                      
			
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.