Hay tardes en que la lluvia luce triste
cual si anduviera vacía de esperanza,
cansada de regates, que al despiste
disimulan disfrutar pues tu te fuiste
y no puede soportar ya la tardanaza.
Tardes hay en que el sigilo está aburrido
e incluso al cielo le nubla la mirada,
pareciera su señuelo se ha perdido
en la bruma de una pena, compungido,
o en la queja de huella de una pisada.
Hay tardes en las que cae a mogollón
sobre escarpadas montañas de la mente,
se oye un rugido o es un grito que insistente
que produce en esa herida un hinchazón
en memoria del reencuentro inexistente.
Pareciera que pidiendo va perdón
como si sintiera verguenza haber caido,
absorta en la tristeza y la emoción
sufrir lamenta la afrenta al corazón
renegando igual que yo de haber nacido.
©donaciano bueno
http://www.donacianobueno.com/
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Autor:
donbuendon (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 28 de junio de 2016 a las 02:51
- Categoría: Triste
- Lecturas: 41
- Usuario favorito de este poema: No te salves.
Offline)
Comentarios3
Tales tardes existen poeta..
Muy buenos versos
saludos
Used es un gran poeta, don Donachio !!! Es usted otro Machado con mucho estilo y talento. Los enanitos le saludan deseando feliz tarde.
Hay tardes que revuelven intimidades
sobre todo si hay niebla y es enero.
El habito hace al monje (la tarde lluviosa propicia lo lúgubre).
Buen poema. Saludos
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