Unión Europea: también matamos mujeres y niños.

angelillo201



 

 

Supongo que se ha perdido la todo, sería mejor pedir a la alcaldesa Tania Baños que hiciera el favor de quitar la bandera Europea del balcón del Ayuntamiento, la que ondea junto la de España y la del País Valenciano – Esto es lo que dije sin que nadie se sorprendiera por mis palabras en la reunión de izquierda unida a la que me habían invitado. Acudí a ésta más que para participar de forma activa con la palabra, para ver como resolvíamos el problema del agua de un terreno que tenía cedido de un militante, pero no pude dejar de invenir sin que mi intervención, sin saber el motivo, llegara a no sorprender a nadie. Lo que dije en la reunión fue recibido sin alegría, ni tampoco descontento, como si fuera algo extraño y absurdo lo expresado, pero a la vez certero, casi como una suplica, como un sueño colectivo irrealizable, o quizás como la derrota de algo querido que se desintegraba como los navíos que llegan a nuestras orillas llenos de cadáveres, o con gente herida y traumatizada que son enviadas a Turquía, o represaliadas en campos de concentración en Europa. Desde luego, todo ese salvajismo organizado por el parlamente europeo estaba quedando lejos. España participaba, pero el flujo migratorio no pasa por nuestras fronteras naturales. Las montañas y ríos que nos separan de gente que hablan otro idioma como franceses, o Portugueses nos aleja del caos de Albania, Grecia, Turquía, Austria, Hungría… Aquí sobrellevamos la miseria y el hambre en plena civilización con ayuda de la familia, los que la tuvieran, y con migajas de limosnas de cáritas y la cruz roja el resto, como es mi caso. Sin embargo se notaba en el aire que ese clima de violencia extrema de barbarie anticivilizadora, con aromas a épocas remotas de los primeros europeos, quizás hubiera llegado ya incluso a vall d´uixó, siendo  los primeros en notarlo los miembros de PCE. Bastaba ver las caras de abatimiento de la gente de izquierda unida, la pobreza de muchos de sus militantes resignados a darle vueltas a la cabeza en sus butacones para comprobar que pese lo extrañas que eran mis palabras dichas al principio:Supongo que se ha perdido la todo.

Eran en cierto modo aceptadas como ciertas.
Entre la gente que allí estaba había un hombre misterioso que leía mundo obrero alejado de la asamblea, y del que salía humo de su pipa. Yo solo veía sus manos, era como de marfil, blancas, huesudas. En la contraportada se veía el articulo de Marina Albiol que yo había leído momentos antes, y que me sirvió para hacer el comentario que hice.

http://www.mundoobrero.es/pl.php?id=5478

Marina Albiol: “Las deportaciones y el hacinamiento de los refugiados es tan fascista como pasearse con una esvástica en la solapa”
De repente, como si adivinara que lo espiaba, este hombre cerró de súbito el periódico. Su aspecto me impresionó, estaba calvo como una bombilla, sus ojos brillaban como si hubiera visto el más allá, sin embargo, no daba miedo, sino respeto, el mismo respeto que se le tiene a un guerreo poeta.
EL silencio imperaba todavía en la reunión, como si se hubiera hecho un espacio en blanco en el pensamiento, como si todos los caminos desde el chavismo al stalinismo estuvieran destinados al fracaso y hubiera que resignarse a vivir bajo el nazismo europeo o algo peor: la experiencia Podemos.

El hombre calvo, del que después supe que llamaban Pequeño, se puso en pie y se quitó la pipa de la boca para hablar.
Note que tenía una gran influencia en el resto, examinándome con la mirada exclamó rompiendo la monotonía de la asamblea con su voz solemne:
Yo estuve allí, en la frontera Húngara hace tan solo dos semanas.
Los barcos alemanes pasaban con sus mercancías hacia rumania, como desde hace miles de años, tranquilos. Las barcazas flotaban cargadas de Opels y volkswagen sobre un agua azulada, profunda, fría, envuelta en nieblas permanentes y sobrecogedoras para latinos como nosotros.
Os relataré lo que vi en esos endiablados campamentos, y las deportaciones. Un horror, una jungla prehistoria en el corazón de Europa.
Como observador de amnistía internacional  seguía los movimientos de  una columna militar Austro húngara hacia la frontera Servia. Nos salimos del Danubio, donde empezó nuestro viaje al aterrizar en Budapest , y subimos después de navegar dos días en un tren mi acompañante y yo. Conmigo venía un enviado de mundo obrero que quería cubrir la noticia.
Su objetivo era demostrar que no era un sueño, sino una pesadilla lo que estaba ocurriendo. Alertar que se está matando a  gente pacifica, refugiados de guerra. Hasta ahora nadie lo cree. Hoy en día hasta los stalinsita piensan que no puede ocurrir esto que os digo, que vivimos en una europa democrática, pero eso hace tiempo que se ha terminado. No es una película lo que os voy a contar, ni ningún cuento. Tengo vídeos que  demuestran lo que está haciendo la E.U. en su territorio.
Yo le interrumpí en ese momento.
¿ Y podríamos verlos?
Pequeño haciendo una mueca de horror dijo que si, sacó de su bolsillo un teléfono con conexión a Internet de su pantalón de campaña con sus dedos huesudos y se dirigió al fondo de la sala donde había una pantalla.
Tras buscar en youtube el vídeo por su título:
En el corazón de Europa.
Tras anuncios de la marca mercedes empezaron a verse letras yendo hacia atrás con un circulo que borraba los números:
3,2,1
Luego se escucha el himno de la alegría.
Vi de refilón los ojos de pequeño mirando su pequeña joya filmada.
En la primera escena se veía una columna de soldados de infantería Europeos, eran unos 12 e iban a pie. El lugar no ofrecía ningún encanto, la niebla rodeaba un bosque cuya masa negra y compacta como bayonetas se agolpaba junto a un sendero cubierto de hojas. De las ramas se escuchaba el graznido de los cuervos, los soldados nerviosos de vez en cuando abrían fuego contra ellos.
Uno de los soldados se acercaba riendo y los recogía, a los que estaba heridos y se agitaban agonizando en el suelo les clavaba un puñal de campaña. Luego el oficial mandaba que los colgaran de las patas de las ramas. Eso indicaba a los refugiados furtivos que ese lugar era territorio controlado por Europeos.

¿ Has filmado como cuelgan los pájaros?
( se escuchaba preguntar en el vídeo  Pequeño al periodista)
Si -le respondía este y el vídeo hacia un pequeño corte y se indicaba otra escena.
Esta transcurría en otro escenario, que no debía estar lejos de ese lugar.
Los soldados eran ahora diferentes, misma indumentaria, mismo mandato europeo, pero por su aspecto parecían Daneses.
La escena estaba subtitulada:
La compañía llevaba estandartes con la imagen de Atila con dos sables cruzados y un hermoso número 7 cosido de oro en la parte superior. Iban sobre tanquetas, era una unidad motorizada, su oficial ,un capitán, iba sobre un sidecar de una BMW de la segunda guerra mundial dando gritos entre las tanquetas que avanzaban en abanico sobre una enorme pradera verde.
¿ Veis aquella colina? Les decía a sus soldados. Allí debemos confinar los refugiados para que sean encerrados y deportados. Echados al asqueroso mar de donde no debieron salir. Hay que sacarlos del bosque que se encuentra a dos millas de este lugar. Está infectado de mujeres y niños Sirios. Hasta aquí llega el asqueroso olor de los pañales y las bragas de esas putas apestadas moras que vienen a nuestra amada europa a vengarse de nosotros porque las cosas no van bien en su jodido país de mierda. Todos son terroristas, hasta los recién nacidos, fanáticos de la guerra. Por su culpa las casas de nuestra amada patria deben estar con los postigos cerrados, porque esos jodidos seguidores de Mahoma, Mahonesa, o como coño se diga a ese que adoran. Pero el mandato del parlamento europeo es muy claro. Ni uno más. Ni uno más. Vamos a darles por culo a esas guarras y a sus putos bastardos.
Wilar, wilar, teniente wilar. Música de Wagner.

 

 

La escena del vídeo de youtube se cerraba con una carga de los soldados europeos sobre las tiendas de campaña de las mujeres y los niños que corrían como si esos soldados se trataran  de los cascos de Atila. La mayoría de mujeres eran atrapadas y metidas en sacos por los soldados a los que ponían cadenas y cargaban como fardos a los camiones Mercedes que subían colina arriba con el sol de poniente salpicando los parabrisas hasta penetrar por las alambradas de un campamento lleno de alambres de espinos. allí se afinaba  población infantil y de mujeres como prisioneros.  helicópteros de carga militar las llevaban dentro de sacos a la frontera turca. Las que conseguían escapar corrían una suerte igual de incierta, los niños eran separados de sus padres y capturados por mafias que los subastaban para trabajo, órganos, o prostitución.
El vídeo terminaba con el periodistas de mundo obrero corriendo por la colina intentando parar los camiones mientras Pequeño le llamaba:
Emilio, Vuelve, vuelve. Te van a matar.
¿ Como podéis matar a mujer y niños? cabrones nazis- Les gritaba Emilio el pacifista lleno de furia tirando piedras a los camiones.
Desde las ventanas un soldado que  sabía español pese a ser rubio y con aspecto de danés le respondía riendo:
Fácil señor, con mandato del parlamente europeo. Es todo legal.

!qué cabrona  es la ley ! ¿ verdad señor?

( reía el soldado sin parar)
Hijos de puta, hijos de puta- fue lo último que gritó Emilio abatido por el cansancio. caía al suelo con los brazos en alto mientras una tanqueta trituradora  con la bandera de las naciones unidas le pasaba legalmente  por encima.
Angelillo de Uixó.

  • Autor: Angelillo de UIxó (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 10 de marzo de 2016 a las 08:04
  • Comentario del autor sobre el poema: la realidad de los refugiados en nuestra Europa vivida como si fuera un cuento que abre los telediarios.
  • Categoría: Cuento
  • Lecturas: 35
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