Con el alma a destajo
El cuerpo entre los cuerpos
Cosecha la impune complicidad
Que juega a la muerte
Convaleciente, de su propia vida
El verdugo pregunta
Por respuestas
Que ya fueron confesas
Furtivos rumores
Traiciones clandestinas
Hipótesis que amenaza
La perturbada conciencia
Dolor que brota
De las venas hinchadas, en
Desahuciados gritos, listos
Para comenzar de nuevo
La soledad, tarde oscurece
Atrás queda la picana
Quedan las dudas
Que asimilan la ira
Por haber dormido al abrigo
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Autor:
Enrico Sanguinetti (
Offline) - Publicado: 1 de marzo de 2016 a las 16:18
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 43
- Usuarios favoritos de este poema: nelida moni, Santiago Miranda.
Offline)
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