Esa, pocas veces me acompaña
Pero Cuando llega no le doy la cara
Es tan grande el susto
Que se borra mi rostro en el espejo
No he podido vencerla
Me he inventado algunas trampas para engañarla
Y siempre resulto sin rostro
La he conocido tanto que la presiento
Siento situaciones, gestos
alertando su posesión
He corrido, me he escondido, nada ha servido
Lo mas cercana que he estado para vencerla,
Son esos días cuando me atrevo a aceptar su invasión
Esa me posee como un demonio
Me llena de escalofríos
Me pone a soñar con mis muertos
Ellos, acuden a auxiliarme
Recomiendan
Preguntar para que muera
...PERO NO SE QUE PREGUNTAR.
Tiene una hermana
Siempre su cómplice,
la acompaña en sus fechorías
Nadie, se ha atrevido a demandarlas
Hoy las denuncio.
Son culpables
Por la muerte de buenos amores
Por la partida de buenos amigos
Por el robo de la alegría
el secuestro de los sueños
El vacío del espíritu
el fracaso por lo amado
Y él mas grave de los delitos
Son culpables
porque te paralizan.
Son asesinas de tu yo mismo.
Te hacen hacer lo que no quieres.
Hoy las denuncio
Pena de muerte
Para las culpables de los días
Cuando el sombrero estorba.
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Autor:
@mariatearaure (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 4 de febrero de 2016 a las 18:41
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 40
- Usuario favorito de este poema: Peregrina.
Offline)
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