Lo que callamos

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  Hermes Antonio Varillas Labrador 3 de enero de 2016 a las 19:17

  Callar y ser cómplice es terrible situación, tal vez es una incorrecta decisión y forma de aplaudir a quien asume una actitud grosera y traicionera... Espero que eso no le ocurra de ninguna manera, que la respuesta debe asumirse de forma inteligente y no debe ser cualesquiera....
  
  “Una historia de celos verdadera”
  - Hermes Varillas Labrador
  
  Y la amó tanto y de tal manera
  que nunca tuvo la suficiente sensatez
  que al amar como antes no amó cualquiera
  incurría en el más garrafal error por celar
  con desespero por la traición que descubriera
  de ella no esperaba tan vil engaño
  ni tan cruel infidelidad que cometiera
  incluso los vecinos de forma cómplice
  prefirieron que en secreto se mantuviera.
  Y se le cegó el entendimiento y la razón
  que casi consume la imprudente loquera
  de ajusticiarlos sin mediar palabra siquiera.
  Gracias a Dios se impuso la racionalidad
  en un acto de inteligente lumbrera.
  El destino es implacable juez y su dictamen
  tal vez un poco tarde, pero llega.
  Ella paga caro después que a él
  la muerte en la vía le sorprendiera
  del aciago y trágico final no se alegra
  sólo que casi tras las rejas se viera
  quede como colofón de esta historia
  la duda y obsesión son falsa bandera
  ni los celos no son moneda justiciera.