Escrito estaba

Cantor

Escrito estaba el encuentro y escrito estaba el final,

una agónica cadencia de pétalos marchitos tocando

el frío piso de madera...

 

Es que ya no te importó, o sabría que no te importaría,

quise dormir mi sueño, mas allá de horas nocturnas

para soñarme contigo...

 

No te juzgo por que nunca prometiste nada, pero eras..

eras a la vez mi juramento y mi verdad

conquistando mi mundo, mi imaginario...

 

Eras mi motivo y mi fuerza, puse en tí mis convicciones

pero te acostumbraste a que te regara a diario

y no viste mis pies enraizados...

 

Ahora me estoy marchitando, esperando...

que una lagrima tuya me riegue, que una voz tuya me llame

que un pensamiento me libere...

 

Si llego a morir en esta espera, solo deseo una cosa,

reencontrarme contigo misma en otros cielos...

o en la reencarnación venidera...

 

Tenerte libre y sentirte sólo mía..

sin ataduras, como hubieras sido diseñada para mi

y yo para tí hasta que culmine nuestra eternidad...

 

 

 

 

 

 

 

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  • Autor: Cantor (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 26 de diciembre de 2015 a las 02:41
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 55
  • Usuario favorito de este poema: Maga11.
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