“Dios manda exterminar a los infieles”,
dogmatiza el caudillo patriarcal.
Espiritualidad enferma y letal
que esparce sus misericordias crueles.
Los niños de Jericó están volviendo
a ser masacrados, los de Belén,
Mizpá, Hazor, los de Siria también.
Guerra, saqueo, genocidio horrendo.
Etnocentrismo y bestialidad
de las hienas beatas del Oriente
que protegen su única verdad.
¡Terrible y Piadosa Divinidad!
Tigris y Éufrates, ríos con sangre
de sueños que no fueron realidad.
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Autor:
Heliconidas (
Offline) - Publicado: 20 de noviembre de 2015 a las 23:52
- Categoría: Triste
- Lecturas: 145
- Usuarios favoritos de este poema: Ma. Gloria Carreón Zapata., De Sol y Luna.
Offline)
Comentarios3
Es lamentable la situación que estamos viviendo, lo más triste es que los niños son las principales víctimas de seres perversos y ambiciosos que no se detienen ante nada. Excelente trabajo estimado autor, le felicito. Un cordial saludo.
Muchas gracias por tu sincera reflexión y por tus comentarios hacia mi obra. Te mando un abrazo poético, sin tiempo ni distancia...
Genial tu poema , esta lleno de verdad y de dolor, es un grito a la ilusión de muchos y muchas de que acabe la guerra y que inicie la verdadera decisión de amar y de ayudar a los demás,
Gracias, amiga, por tus elogios. Un abrazo sin tiempo ni distancia...
OH Y MÁS OH,
SE ME HA CAÍDO LA TRÁQUEA
POR TAL DESTREZA DE LA PALABRA.
Gracias cofrade poeta por sus pintorezcas palabras... Le mando un abrazo sin tiempo ni distancia.
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