A LA GUAIRA LLEGUÉ

SUEÑO DELIRANTE

llego a su casa  

miro por la ventana  

miro para ver qué pasa  

esto si me extraña.

Donde estás? Grito una vez más  

subo las escaleras  

no me deja en paz  

ella no me espera.

Sigo subiendo  

y no sé cuándo debo parar  

solo mis pasos sigo oyendo  

a su puerta debo entrar.

Llamo por su nombre  

y las puertas están abiertas  

no sé dónde se esconde

en un escondite bien perfecta.  

Te siento aquí    

con tus palabras constantes  

siempre sueño contigo  

palabras y frases delirantes  

son cosas que yo digo.

Entre llantos y lágrimas  

nunca te puedo encontrar  

con toda mi fuerza máxima  

al otro lado voy a pasar.

TE FUISTE

Te fuiste  

y detrás de ti me dejaste  

a quien te amaba  

que después transformaste  

en este ser arrastrándose como larva.  

Ahora que quiero levantarme  

y mis pies no me dan  

mal para mí que puedo cansarme  

no sé para donde van.  

No maldigo la vida  

ni maldigo el animal  

solo cuido quien peligra  

y a quien quiere controlar.

Levántate digo a mis pies  

párate y ve al horizonte una vez mas

no te das cuenta que es!  

Ya no sabes para dónde vas.  

SOÑANDO

Soñé con mi amor

fue la primera visión

después de tanto tiempo.

Era ella pero más distinta

la veía y no me conocía  

después que su papá compró otra casa  

ya no la podía ver.

Hablabas ahora con otras personas

mostrando algo lo señalabas

que no tuve curiosidad

pero sonreías  

cosa que no es tuya – contrariedad.

En el sueño tus ojos pasaban por mí  

y no me conocías  

era como si no fuese nadie – me ignorabas  

estaba en un inmenso jardín

como si no hubiese nadie allí.

Estaba trabando y soñando

cuando iba despertar

para cuando iba dudar

y me puse a pensar

que tus ojos no me engañaban  

esa voz para quien hablabas

salía de tu boca – me atormentaba.

Llorando desperté

cuando desapareciste

como si nada hubiese pasado.

DOMINGOS DE SOLEDAD

Largos domingos solo encerrado

todo el día pensando en ti  

no me visitaba nadie y allí no había nadie

un tocadiscos con la misma melodía  

música instrumental era la que tenía  

escuchaba la misma que ya la sabía

y de memoria la sentía.

Esperaba por los domingos

que era el día que te podía ver

pero cuando en la mañana no llegabas  

otra semana tenía que esperar.

Lavando mi ropa y nada que cocinar

me alegraba cuando me venían a buscar  

era como un perrito que allí estaba

y tenía siempre que estar.

De nuevo el mismo disco ponía a tocar  

ni un televisor tenía para ver

esa música instrumental conocida

puerto piritu ni sabía dónde estar.

Mientras tanto pensaba en tu rostro

era lo único que tenía en quien pensar

eso me mantiene vivo  

mientras tenga con quien soñar.